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Adrián Ramírez, regional advisory manager de la fintech Paymentology, aseguró que ofrecen soluciones para el uso de tarjetas.
Adrián Ramírez, regional advisory manager de la fintech Paymentology, aseguró que ofrecen soluciones para el uso de tarjetas, así como para facilitar la recepción de remesas
Paymentology es una fintech que trabaja con otros actores del sector para redefinir la forma en que los bancos y otras soluciones financieras ofrecen a las empresas y consumidores tarjetas y métodos de pago. Adrián Ramírez, regional advisory manager de la compañía, aseguró que operan en más de 50 países, con una fuerte presencia en México y Colombia en América Latina.
Somos un emisor procesador y a través de nuestra tecnología ayudamos a empresas como fintechs, telcos o bancos para justamente emitir tarjetas de débito, crédito o prepago en sus dos formatos físico-virtual. Adicionalmente, ofrecemos todos los servicios de valores agregados que giran alrededor de este medio de pago. Por ejemplo, tenemos una tecnología para que se reciban remesas a través de las tarjetas.
Tener una tarjeta no es suficiente, se debe tener un proveedor tecnológico con capacidad de recibir esas transacciones a través de dicha tarjeta: un software o una plataforma emisora. Tenemos dos maneras de transmitir dinero. Una es de forma local, en Colombia, pero cuando se envían remesas pues están los canales tradicionales y está surgiendo el nuevo, de corte digital, que es justamente la tarjeta. Varios de nuestros clientes a través de un partner mandan un link a Estados Unidos y esta persona bordea sus tarjeta y la otra recibe esa remesa en la tarjeta del banco que tenga. Hay transparencia, porque se sabe cuánto va a costar, así como inmediatez.
“Uno de nuestros objetivos principales es ampliar la inclusión financiera a nivel global y Latinoamérica es un mercado clave para este propósito”.
En Colombia se está recibiendo más remesas que exportaciones por petróleo. Por ello, ahora vale la pena hablar mucho más de ellas. El primer punto destacable es la digitalización del proceso, pues lo hacemos más eficiente y conveniente para el usuario final. El segundo es la inmediatez: permite tener y gastarlo en el momento. No hay dependencia de una oficina. Por último, no hay que hacer ningún proceso adicional para tener una recepción de remesa. Como el banco emisor ya tiene tus datos, no es necesaria la identificación.
No trabajamos con bancos, pero estamos en conversaciones. Y en materia de fintechs tenemos al menos tres. Los bancos tienen procesos para entender lo que se hará y se mueven mucho más lento, pues, caso contrario de una fintech, el banco ya tiene su mercado y necesitan hacer pruebas primero.
En ese momento sí tenemos una estrategia para poder ofrecer soluciones directamente a los bancos. Nuestros mercados principales en la región son México y Colombia. Por ello, nos estamos enfocando mucho en ver cómo podemos ofrecer este tipo de soluciones para los bancos colombianos.
Operamos en más de 50 países y tenemos presencia en América Latina, desde México, pasando por Perú y Colombia. Justamente vamos a iniciar con la operación en Argentina, pero acá tenemos toda la parte del Caribe y Centroamérica. Tenemos una buena presencia. Contamos con alrededor de 35 a 40 clientes, entre bancos y fintech.
El brasilero tiene ciertas costumbres, un ecosistema y entorno que no puede ser igual. Lo que sí vemos es que Bre-B abre la puerta a otras de la parte de la innovación. Es algo que realmente sí necesita el mercado colombiano. En México y Brasil se pueden hacer transferencias de manera instantánea y sin coste y acá no existía eso. Es algo muy bueno que le ayuda al colombiano y poco a poco irá evolucionando para entender al PIX, aunque no a 100%.
No, la regulación existe por algo y es para proteger a los actores que interactúan. No lo veo como una carencia.
El anuncio se da una semana después de que el negocio entre las entidades financieras recibiera aprobación por parte de la Superfinanciera
Empezó el año rodando los 1.400 puntos, para mayo ya alcanzaba un pico importante de 1.699 y seguiría pronunciando su ascenso hasta hoy
Una facilidad puntual de esta innovación, es la posibilidad de almacenar las tarjetas del digitales del banco, en la wallet
