MI SELECCIÓN DE NOTICIAS
Noticias personalizadas, de acuerdo a sus temas de interés
La economía ya empieza a evidenciar los primeros indicios de desaceleración
La inflación y las tasas de interés inciden en el pronóstico de este año para entidades como el Banco Mundial y el Fondo Monetario Internacional
Este año se caracteriza por un comportamiento de desaceleración natural luego de dos años de reactivación económica. Es allí donde radican las proyecciones del Banco Mundial, del Fondo Monetario Internacional y del Banco de la República, que no superan 1,1%.
Centros de investigación como Alianza Valores, Corficolombiana, Bancolombia, BTG Pactual y Banco de Bogotá estiman cifras cercanas, con la máxima de 1,5%. (Ver gráfico)
Camilo Pérez, director de Investigaciones Económicas del Banco de Bogotá, indica que “la proyección para este año es de 1,5%, somos relativamente optimistas. Todos los analistas le apuntamos cerca a esto”.
En el marco local, el Banco de la República pronosticó a inicio del año un crecimiento económico de 0,2%; pero en marzo, la Junta Directiva actualizó el dato sobre el crecimiento del PIB para 2023 y pasó a 0,84%.
Mientras que el Banco Mundial estimaba un crecimiento de 1,3% al inicio del año, pero este mes se actualizó la proyección y quedó en 1,1%.
Y, por su parte, el FMI posicionó a Colombia como la economía que menos crecerá en la región con 1% , aunque en enero de este año la entidad había pronosticado un crecimiento de 1,1%.
Alianza Valores tiene una proyección de 1%. Mientras que BTG Pactual es del equipo optimista con 1,4%. Y la más cercana de las entidades privadas al pronóstico del Banco de la República es Bancolombia, con 0,6%.
Según David Cubides, director de investigaciones económicas en Alianza Valores, las grandes razones son tres “están las tasas de interés que vienen subiendo de forma importante y esto modera la dinámica de consumo. Y tenemos una inflación en los niveles más altos desde 1999, eso también retrasa los procesos de gasto”.
Ese gasto que se ve afectado es aproximadamente dos terceras partes del PIB total. “Y otro factor relevante es el efecto estadístico base, pues el año pasado creció en un nivel alto, será complicado romper esa estadística base”, agrega Cubides.
Camila Orbegozo, directora de Análisis Sectorial en Corficolombiana, coincide con estas razones, las cuales resultan en el deterioro del poder adquisitivo de los hogares, pero agrega otros motivos como “la depreciación anual acumulada del peso colombiano y un mercado laboral menos dinámico”.
Pérez resalta el contexto global, “el mundo en general se está desacelerando, vemos mayores tasas de interés y más volatilidad en los mercados”. En el frente local, el experto indica que, teniendo en cuenta que los dos años anteriores “fueron de excepcional crecimiento, los hogares consumieron más allá de sus posibilidades y la producción estuvo un poco más alta, este año sería de ajuste en consumo e inversión”.
Julio Romero, economista jefe en Corficolombiana, coincide en que los dos años pasados generaron un consumo dinámico y esto presiona la inflación. “Se espera que la demanda interna se modere porque se pueden generar desequilibrios en la economía si se mantiene ese ritmo de crecimiento que vimos en el último año y medio”.
De acuerdo con los analistas, sectores como el entretenimiento, el comercio y la industria posiblemente verán la desaceleración, pero en general todos los sectores a excepción del agro verán estos resultados, comercio, hotelería y restaurantes podrían ser los más afectados en el año.
Y teniendo en cuenta que la inversión privada recibirá impacto, esto se reflejará en un menor crecimiento para el sector de construcción, en particular de vivienda, que ya muestra fuertes signos de desaceleración, aunque la construcción de infraestructura podría presentar buen dinamismo.
Las ventas de vivienda y las matrículas de vehículos registran números rojos; y aumenta la cartera vencida en los créditos de consumo
Hoy, cuando ya se completa casi una tercera parte del año, todo apunta a que se está cumpliendo la profecía para el año 2023
La desaceleración es un proceso no solo inevitable sino necesario, por cuanto la economía colombiana venía en un proceso de crecimiento insostenible que ponía en riesgo la estabilidad macroeconómica