.
Tecnología

Facturación electrónica


Conozca los ahorros que puede tener su empresa al dejar de usar el papel para facturar

TECNOLOGÍA

Cadena, Certicámara y Siigo facturan para más de 300.000 clientes en Colombia

martes, 13 de agosto de 2019

La expectativa del mercado es crecer en el número de empresas autorizadas por la Dian en el segundo semestre del año

Un crecimiento constante, pero no tan dinámico como en 2018, tuvieron durante el primer semestre de 2019 las empresas autorizadas por la Dian para prestar el servicio de facturación electrónica. Los cambios normativos y la incredulidad de muchas de las empresas sobre la verdadera necesidad legal y práctica de asumir esta herramienta, mantuvo tanto a clientes como a proveedores a la expectativa.

En el último trimestre se dio la ratificación de las fechas de la Dian para que entren en vigencia todas las normativas de facturación electrónica, y sobre todo el cambio de modelo de validación previa. A continuación presentamos tres casos de empresas certificadas que muestran su experiencia.

La primera de ellas es Cadena, con sede en Medellín y una de las empresas líderes en el sector por antigüedad y número de clientes y operaciones, ha emitido más de 36 millones de facturas a lo largo de 2019, que han movido aproximadamente $15 billones.

Cadena les presta servicios de facturación electrónica a 800 clientes bajo el nuevo modelo. En 2018 manejaron un promedio de 600 empresas y en lo que va de 2019 han aumentado su número de servicios con 200 nuevos negocios. Según la compañía, cerca de 17% del volumen de toda la facturación de sus clientes que hoy lo están haciendo por este sistema.

La expectativa de Cadena es que siendo proveedores tecnológicos bajo el modelo tradicional y estando habilitados bajo el nuevo modelo de validación previa, el segundo semestre de 2019 deberá ser muy fructífero, con un estimado de ingreso de por lo menos 200.000 empresas, ya que dentro de un año la expectativa de la Dian, según la compañía, es que haya en el sistema unas 500.000 empresas.

Cadena tiene clientes como Colsubsidio, Directv, Avon y los grupos Auteco y Nutresa.

Un segundo caso es el de Certicámara S.A. que fue creada en 2001 como una iniciativa de la Cámara de Comercio de Bogotá en asocio con las Cámaras de Comercio de Medellín, Cali, Bucaramanga, Cúcuta, Aburrá Sur y Confecámaras. Esta otra de las empresas líderes en el país en el tema de proveer soluciones de facturación electrónica.

Como proveedor tecnológico autorizado bajo la anterior reglamentación y la que se encuentra en vigencia, han apoyado a acerca de 500 empresas a nivel nacional, dentro de las que se encuentran Redeban y BCI Ingeniería. También tienen un gran número de empresas medianas como clientes.

Certicámara tiene su mayor cantidad de clientes en el centro del país, aunque también tiene presencia en Medellín, Cali, Pereira y Bucaramanga.

Siigo, es el tercer ejemplo de una empresa más pequeña que entró al negocio, es bogotana con más de 31 años de experiencia en ayudas tecnológicas para empresarios y contadores y con su software 100% en la nube. En la actualidad cuentan con más de 130.000 empresarios que utilizan sus operaciones administrativas y contables.

A principios de 2019, Siigo se unió con Ilimitada, una de las empresas líderes del Valle de Aburrá, para fortalecer su presencia en este mercado antioqueño.

En la actualidad, todos sus clientes están habilitados para facturar electrónicamente, esperan que al final del año todos sus clientes actuales y los nuevos estén ya en esa práctica.

Conozca los beneficios exclusivos para
nuestros suscriptores

ACCEDA YA SUSCRÍBASE YA

MÁS DE FACTURA ELECTRÓNICA AGOSTO 2019

Tecnología 13/08/2019 La e-factura es un paso a la modernización comercial y la digitalización económica

La factura electrónica es vista como una herramienta que crea un ecosistema digital y que está tomando fuerza en el mercado local

Tecnología 13/08/2019 La Dian estableció una serie de nuevos requisitos de facturación electrónica

Son varias las características que ahora deben tener los documentos en la segunda fase de su implementación.