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El mercado de carbono se refiere a la compra y venta de créditos que representan la emisión de una tonelada métrica de tCO2e
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El mercado de carbono permite la compra y venta de unidades de carbono con el fin de compensar las emisiones de gases de efecto invernadero de las empresas
El medio ambiente es una preocupación que cada vez llega a más personas, y consigo, a más aristas de nuestro día a día, pues así como se encuentran campañas de reciclaje, existen métodos mucho más complejos con los que se busca mitigar algunas emisiones que contaminan el planeta.
Este es el caso del mercado voluntario de carbono, un tema que tal vez no es tan recurrente, pero que busca generar un impacto positivo en el planeta. Además, existe en Colombia antes de la creación de la ley 1819 de 2016, con la que se fijó el impuesto al carbono en los combustibles fósiles líquidos como incitativa ambiental.
Este es definido en pocas palabras como la compra y venta de unidades de carbono. “El mercado de carbono se refiere a la compra y venta de créditos que representan la captura o emisión evitada de una tonelada métrica (t) de dióxido de carbono equivalente (tCO2e)”, explicó el Ministerio de Ambiente.
De hecho, este es uno de los mecanismos que se ha creado con el fin de reducir gases de efecto invernadero, GEI, pues se podría decir que en este mercado la moneda es el CO2 equivalente, ya que, tal como explica el Ministerio, es el “ GEI más abundante en la atmósfera y facilita los procesos de conteo”.
Antes de profundizar más en el tema, hay que tener claro que existen dos mercados principales para el carbono en proyectos que se realizan en países en desarrollo.
El MinAmbiente explicó que el primero es el mercado regulado, que enmarca reglas internacionales, y el segundo es el mercado voluntario, el cual, no se encuentra regulado e incluye variedad de relaciones comerciales y estándares voluntarios para los proyectos.
Algo importante es que los proyectos realizados en el mercado voluntario de carbono deben cumplir con ciertas condiciones que permitan verificar que, en efecto, las emisiones están siendo reducidas y que son legítimas.
De hecho, para que esto sea posible, se han creado algunas certificaciones que, según el Ministerio, sirven como garantía frente a la integridad y veracidad de estos proyectos. Estas certificaciones permiten que el proyecto se apruebe.
Allí este entra en marcha mediante la emisión de bonos de carbono que pueden ser comercializados en mercados internacionales a los que los compradores interesados tienen acceso. Una vez realizada la transacción de carbono, el comprador habrá reducido sus emisiones.
Además de ello, estos proyectos deben cumplir con ciertas normas nacionales e internacionales.
“Estos bonos pueden ser adquiridos por empresas o personas que deseen compensar sus emisiones de gases de efecto invernadero o para cumplir con compromisos climáticos de los países”.
“En Colombia, el precio del bono de carbono está fijado por el impuesto nacional al carbono que para 2023 es de $20.500 por tonelada de carbono equivalente, que son aproximadamente US$5”.
“Estos bonos pueden ser adquiridos por empresas o personas que deseen compensar sus emisiones de gases de efecto invernadero o para cumplir con compromisos climáticos de los países”, indicó Andrés Perilla, líder de la estrategia de cambio climático de Bancolombia, en un blog de la entidad.
Perilla, además, indicó en septiembre del año pasado que para 2023 todas las empresas debían reportar obligatoriamente sus emisiones de CO2.
Así como todo en el mundo accionario, existen tarifas para poder hacer estas adquisiciones, las cuales varían dependiendo del país.
“En Colombia el precio del bono de carbono está fijado por el impuesto nacional al carbono, que para 2023 es de $20.500 por tonelada de carbono equivalente, que son aproximadamente US$5”, aseguró Verónica Vallejo, asesora empresarial y especialista en sostenibilidad y mercado de capitales.
A su vez, mencionó que, en los últimos días, las tarifas han subido considerablemente, pues “el precio interno del carbono utilizado por las empresas, según, Carbon Disclosure Project, CDP, está al rededor de US$25, pero su valor máximo podría llegar a US$200. El precio del futuro de emisiones de carbono de la Unión Europea (Ets) está al rededor de los US$81”, añadió Vallejo.
Este es un punto importante, pues el mercado de carbono suele confundirse con los bonos sostenibles.
“El mercado de carbono es diferente al mercado de las inversiones temáticas y de los bonos sostenibles. Estos dos últimos son en el mercado de capitales un título de deuda, por ejemplo, un bono verde. En el caso de los bonos de carbono, son los que se emiten para compensar la emisión de los gases con efecto invernadero”, precisó Vallejo.
De hecho, son una compensación a las emisiones de carbono que generan las empresas en sus operaciones.
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