Jardines de La Esperanza se convierte en holding

Las tradicionales funerarias son cosa del pasado. Ahora los negocios alrededor de la muerte no sólo vienen sufriendo una transformación sustancial (evidente en los últimos 10 años con mejores servicios y productos) sino que además las prestadoras y operadoras funerarias también se están transformando como compañías.

Este es el caso de Jardines de la Esperanza, una empresa funeraria que nació hace 42 años en Manizales por una circunstancia más que sentida. Fue concebida por personas naturales y nació, precisamente, por la necesidad de uno de los accionistas de enterrar a un familiar. Era la época en que en la conservadora Manizales no se permitía sepultar personas con religión distinta a la Católica en el cementerio que servía a la ciudad. El familiar del socio tuvo que ser enterrado en Bogotá. Ese fue el detonante para reunir a un grupo de hombres de negocios con la intención de crear un cementerio donde las personas, sin importar su religión o condición social, pudieran darle a sus familiares una sepultura digna.

El cementerio se creó y, curiosamente, la Curia se vinculó como accionista. Hoy no hace parte de la compañía.

Esta es la génesis de Jardines de La Esperanza, que tras cuatro décadas en el negocio funerario y con presencia en el Eje Cafetero, decidió dar un paso para convertirse en una holding empresarial con dos negocios y marcas definidas: Prever y Siempre. El grupo es liderado por Prever, una compañía de Medellín, con amplia experiencia en el mercado funerario, que hace más de 20 años entró como accionista de Jardines de La Esperanza. “Hace un año empezamos un proceso de transformación y hoy nos van a conocer bajo la marca Prever en todo el país que se encarga de la comercialización de productos y servicios exequiales. Siempre, será la marca que cobije a las prestadoras de los servicios. Las empresas como tales, es decir las funerarias, no desaparecen, simplemente nos cobijamos bajo nuevas marcas”, dijo la gerente de Siempre, Romelia Edith Giraldo. Con la transformación, el grupo queda con una empresa nacional comercializadora, Prever S.A.S, y la prestadora que tiene nueve casas funerales y siete centros memoriales (cementerios) en el país.

“A partir de ahora en Manizales, por ejemplo, nos vamos a llamar Jardines Centro Memorial. Con la transformación empresarial buscamos ampliar la presencia nacional. Este año esperamos crecer un 15% en el mercado y terminar con ventas por $50.000 millones”, agregó. Hoy el grupo participa con 10% del mercado. La operación hace parte de una serie de movidas empresariales que viene sucediendo en el sector funerario y que el vicepresidente del Comité Nacional Funerario y Parques Cementerios de Fenalco, Armando Franco, destaca como alianzas y fusiones porque el número de empresa prestadoras sigue igual.

Señaló que son unas 42 firmas grandes dedicadas al negocio exequial, que el año pasado hicieron 198.718 servicios. Movieron $492.000 millones, que representan (sumados todos los productos incluida la previsión y según las cuentas de Franco) 0,12% del PIB del país. Del total de los servicios realizados en Colombia, 28% fueron por cremación y 72% inhumaciones, lo que indica que los entierros siguen ganando la partida. En Antioquia esta proporción es inversa.

La opinión

Armando Franco
Vicepresidente del comité nacional funerario y parques cementerios de Fenalco
“El sector funerario mueve al año $492.000 millones, que representa 0,12% del PIB del país. Está conformado por 42 grandes firmas que en 2013 hicieron 198.718 servicios”