Freywille agudiza competencia en el nicho de joyerías de lujo

La buena acogida de la marca, la mano de obra calificada y la coyuntura socioeconómica del mercado colombiano motivaron a la marca austríaca de joyas Freywille a invertir recursos propios para operar su primera boutique en Colombia.

El local, cuyo diseño será concebido por el equipo de arquitectos que posee la compañía en Viena, no solo será su primer punto de venta en el territorio nacional, sino también en América Latina.

“Bogotá es una ciudad reconocida en el ámbito internacional, y en particular en América del Sur, no solo por sus iniciativas a nivel urbano y social, sino por su alto nivel cultural y gran potencial artístico, cualidades con las cuales nos identificamos al 100%”, indicó Friedrich Wille, CEO y fundador de la marca.

Aunque no se detalló la suma de dinero empleada para la apertura del local, que se abrirá en el Centro Comercial Andino en Bogotá, se precisó que la mayor parte del mobiliario, el cual en un 90% es un trabajo en madera y cristalería, será fabricado en la capital del país. “Esto, gracias a los grandes estándares de calidad disponibles en el país”, indicó Biviana Buitrago, representante de Freywille en Colombia.

Una de las características por la que es famosa esta firma es por su proceso de producción de cada pieza, la cual tiene alrededor de 80 a 10 pasos de trabajo. En su mayoría, estas fases son hechas a mano.

“Colombia ha tenido cambios económicos, políticos y sociales, los cuales han incrementado la confianza de empresas extranjeras como Freywille. Se destacan su crecimiento económico, el cual ha sido estable y positivo en los últimos años; el hecho de que las calificadoras de riesgo mejoraran la valoración del nivel de riesgo crediticio del país moviéndolo a ‘investment grade’ en sus rankings, su constante compromiso por encontrar una solución a los problemas de violencia y orden público, entre otros.”, dijo Buitrago.

Entre las exclusivas piezas de joyería artística que ofrecerá la firma en colecciones de fino esmalte y accesorios de seda se encuentran: pendientes, colgantes, pulseras, anillos, relojes, broches, bolsos, mancornas; además de accesorios como pañuelos en 100% seda, corbatas y elementos de escritura.

La mayoría de estas piezas son célebres por la técnica de fabricación de esmaltado a fuego que usa la marca y que permite mantener los colores puros y vivos en la pieza. Es tan complejo y dedicado el proceso de fabricación, que los directivos de la compañía destacaron que la producción de cada colección tarda cerca de 2 años.

“Creamos exclusivas joyas con un alto valor artístico, las cuales acentúan la individualidad de cada uno de nuestros apreciados clientes. Es ciertamente, el diseño artístico de nuestras colecciones, llenas de emoción y color, la que nos hace únicos”, agregó Wille.

En 2012, Freywille registró un crecimiento de entre 6% y 7% en el mercado del lujo, la tasa de exportación de sus creaciones es cerca del 85%, posee 103 boutiques y más de 670 empleados en el mundo.

La compañía de una pareja emprendedora
La empresa Freywille fue fundada por la artista Michaela Frey en 1951 en Viena (Austria). Los primeros trabajos fueron en decoración y producción de joyas de sencillo esmalte. En los años 70, Friedrich Wille se unió a la compañía para asumir las responsabilidades gerenciales. Cuando Frey falleció en 1980, Wille compró toda la compañía y asumió el cargo de gerente general. Es ahí cuando entró a la empresa la artista Simone Grünberger, quien después se convirtió en esposa de Wille. A principios de los 90, la Fundación Claude Monet contactó a la firma y ahí nació la primera colección de Freywille.