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La compañía reportó que además, con corte a junio, hizo transferencias por $27.800 millones a 56 municipios en los que tiene operación, cifra que creció 51% anual
Celsia se ha convertido en uno de los jugadores más relevantes para el sistema energético en Colombia, con participación en todos los eslabones de la cadena y con un portafolio compuesto, en su mayoría, por fuentes renovables para la generación.
Actualmente esta empresa que hace parte de Grupo Argos es el cuarto mayor generador de energía para el mercado local y es el competidor privado con la mayor capacidad fotovoltaica.
Recientemente, la organización reportó que, desde su entrada a Tolima, en 2019, “la cantidad de veces que se va la energía durante el año ha disminuido en promedio 57%, y el tiempo que duran las interrupciones ha bajado 9%”.
Tal como lo detalló Esteban Piedrahíta, líder financiero de Celsia, esa mejora es “gracias a un robusto plan de inversiones por más de $802.000 millones, lo que incluye la construcción de nuevas subestaciones, modernización y ampliación de las subestaciones existentes, construcción de nuevos circuitos y mejoramiento de los existentes”.
A su público de interés, la empresa le reportó un crecimiento financiero sostenido durante la última década: los ingresos consolidados pasaron de $3,7 billones, en 2015, a $6,8 billones en 2024.
Además, el Ebitda se elevó de $ 683.000 millones a $1,5 billones, el patrimonio creció 30% hasta $5,4 billones y los activos consolidados se expandieron 50% hasta $15,1 billones.
Para el primer semestre de 2025, la compañía transfirió cerca de $27.800 millones a 56 municipios y autoridades ambientales en siete departamentos del país, cifra que se tradujo en un aumento anual de 51%.
“Desde que comenzamos a operar el servicio de energía en el Tolima en 2019, detectamos la necesidad de hacer una inversión importante de obras eléctricas para reforzar la confiabilidad”.
“Estamos en un proceso de prácticamente duplicar la capacidad instalada de energías renovables en Colombia. La meta es terminar con 1.000 megavatios, mayoritariamente de fuente solar”.
“Entre los municipios beneficiados se encuentran algunos históricamente afectados por el conflicto, como Suárez, Morales, Puracé, Cajibío, El Tambo y Totoró en el Cauca; y Buenaventura y Dagua en el Valle del Cauca”, detalló Celsia.
También se incluyen territorios apartados como Roncesvalles y Purificación, en el Tolima; Jericó, San José de la Montaña y Santa Rosa de Osos, en Antioquia; así como otros con vocación turística como Calima-El Darién y Buga, en el Valle del Cauca, y Prado, en Tolima.
Celsia detalló que opera 19 plantas hidroeléctricas, dos térmicas y seis granjas solares en los departamentos beneficiados: “Esta diversificación energética no solo fortalece la confiabilidad del sistema eléctrico nacional, sino que también permite que las comunidades del área de influencia reciban beneficios económicos directos derivados de la operación”.
Para cumplir con el contrato social y responderles a los accionistas, la empresa también tiene la mira puesta en diversos proyectos para robustecer la cartera de activos. Por ejemplo, tiene 300 MV solares en obra.
Durante la teleconferencia para compartir los resultados del segundo trimestre, Ricardo Sierra anunció que, durante septiembre, se revelará al mercado la nueva marca que ejecutará el negocio agrupado en la plataforma Laurel.
Este nuevo brazo operativo nació como un intraemprendimiento en el marco de EnergizarC; el programa estructurado para proyectar el valor fundamental de la empresa de cara al mercado.
“Los productos que va a incluir esta compañía son de generación solar de pequeña escala; es básicamente lo que traíamos con la plataforma que habíamos llamado Laurel, que se refiere a esas soluciones por debajo de 8 MW: techos y pequeñas granjas solares, iluminación eficiente, aire comprimido, sistemas de bombeo, distritos térmicos, monitoreo y generación distribuida, entre otros”, comentó Ricardo Sierra, presidente de Celsia.
“Esperamos que esa compañía podamos vincularle un socio o traer capital fresco que nos permita desarrollar su plan de inversiones que, con los clientes que tenemos identificados y con el potencial que tenemos identificado, puede llegar a una cifra de entre US$500 millones y US$600 millones en un proceso de siete años, es una compañía que puede convertirse en un campeón regional”, añadió.
La organización prevé que todavía queda potencial para su negocio, especialmente porque el consumo energético per cápita en Colombia representa 25% del consumo en los países de la Ocde, “lo que deja ver el enorme potencial de crecimiento de la demanda, especialmente en un escenario donde se acelera la electrificación del transporte”.
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