Solo por mejorar la calidad los cafés especiales dan 10% más ingreso al productor

Si bien el concepto de café especial surgió en el mundo desde los años 70, aún no hay consenso frente a su significado. Por un lado, Roberto Vélez, gerente de la Federación Nacional de Cafeteros (FNC), ha asegurado que este podría enmarcar todo grano que genere un mayor ingreso al productor.

Y por el otro, Henry Leandro Rincón, coordinador de cafés especiales de la Cooperativa de Cafetaleros del Norte del Valle (Cafenorte), asegura que un café especial se puede identificar por diferentes factores. Uno referente a la sostenibilidad ambiental o las características de comercio justo que tenga la finca productora, que pueden comprobarse a través de diferentes certificaciones internacionales como la ‘Fair Trade’.

Otro también hace referencia a los atributos del café en taza. Un comprador o catador puede estar interesado en pagar más por el producto, si al momento de servirlo tiene un sabor que lo distingue de los demás. Además, también cuenta el origen del grano. En muchas ocasiones un café con denominación de origen es también considerado como especial.

Pero si en algo concuerdan los expertos y Cafenorte es en que tan solo mejorando la calidad del producto se aumenta 10% el ingreso del caficultor. Algo que solo se logra mejorando las prácticas en finca, incrementando la productividad y también cambiándose de los cultivos tradicionales a microlotes de variedades especiales como la castillo, caturro o supremo.

Desde 2013, Cafenorte ha impulsado el desarrollo de microlotes de variedades especiales, buscando un aumento de la productividad por hectárea cultivada. Un proyecto que los ha llevado a producir hasta 15 arrobas en dos hectáreas, y a mejorar la calidad del café en taza.

“Al cambiar de un lote tradicional a un microlote hay una mejora considerable de los precios en finca”, aseguró Rincón. Aunque determinar un cifra promedio de incremento del ingreso es difícil porque depende de qué tan bueno sea el café y del gusto del cliente, que es quien paga un valor excedente.

Con el más reciente concurso de cafés especiales del Norte del Valle se logró determinar un monto. El cafetero ganador aumentó cuatro veces el precio de su producto, tan solo por tener el primer lugar en el certamen, algo que también subió el pago por arroba en $5.000.

Cabe resaltar que Cafenorte cuenta con un laboratorio especializado donde se determinan las calidades de los cafés en taza, la primera Escuela de Barismo del país, un centro de tostión y otras herramientas diseñadas para que los agricultores mejoren sus prácticas con el fin de mejorar sus ingresos.

Recordemos que según la FNC y el Foro Mundial de Cafeteros, realizado hace pocos meses en Colombia, la principal problemática del sector es la de los bajos precios por carga.

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Es por esto que el acompañamiento de las cooperativas en el proceso de transición a microlotes de cafés especiales es fundamental para aumentar el pago. Además de ser un proceso que no genera mayores sobrecostos al productor, porque según expertos de Cafenorte “se trabaja con lo que se tiene en la finca”.

Los productores de la región incluso afirman que sin la cooperativa el precio del grano caería entre 30%y 35%, debido a la intermediación en comercialización y la asesoría brindada para mejorar la calidad el café en taza desde las buenas prácticas en el cultivo, el manejo en poscosecha y el conocimiento sobre sus atributos.