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En su carta semanal dirigida a los cafeteros, Muñoz se refirió a una reciente columna de Lora, en la cual señala que los cafeteros pagan muchos impuestos injustificados (parafiscales) que van al sostenimiento de la Federación y no al beneficio de los propios cultivadores. Le sugirió al Gobierno, que “defienda a los caficultores, no a la Federación; reformen a fondo la “institucionalidad cafetera””.
Muñoz respondió diciendo que algunos analistas han emprendido una campaña para desprestigiar la institucionalidad, refiriéndose además, a los puntos que lo apartan del informe final de la Misión Cafetera.
“El señor Lora insiste en desmontar lo que llama de manera peyorativa “la institucionalidad” con lo que da libre espacio para que sea el propio mercado el que defienda a nuestro productor, y cuando este llegue a la plaza de cada municipio con su producto se lo paguen “los mayoristas de las multinacionales” al precio que les provoque, si es que les apetece comprar ese día, y si es que existe puesto de compra”, sostuvo.
Lo cierto es que el debate cafetero va para largo. Un grupo de cultivadores, que representa 53% de la producción y que ha pedido la renuncia de Muñoz, a la gerencia de Fedecafé, ya ha mostrado abiertamente su inconformidad por los bajos precios internos del grano afectados por la caída sustancial de la cotización externa en más de 20%, lo que impacta directamente en el ingreso local.
De ahí parte un panorama oscuro para los cultivadores porque, según dijo el representante por Risaralda en el Comité Nacional de Cafeteros, Alejandro Corrales, están produciendo a pérdida. Por ellos los cultivadores, le vienen planteando al Gobierno la necesidad de un fondo de estabilización de precios. Este ha reiterado que no habrá para 2015 subsidios. Pero este panorama contrasta con la buena cosecha. Ayer la Fedecafé reportó que en los últimos doce meses la producción de grano fue cercana a 12,4 millones de sacos de 60 kilos, acercándose a los niveles históricos. En lo corrido de 2015 la recolección superó los 2,1 millones de sacos es decir un crecimiento de 12% lo que augura un buen año.
Lo que dice la misión
El mecanismo de garantía de compra, la regulación de los granos con calidad de exportación, el capital social, la transferencia de precio y la administración de la cuota parafiscal de los cafeteros hacen parte de las 10 recomendaciones finales de la Misión que fueron cuestionadas por la Fedecafé por considerar que no le hace justicia a sus esfuerzos.
Así quedó consignado en el informe final de la Misión de Estudios para la Competitividad de la Caficultura, elaborado por un grupo de siete académicos a los que se les asignó la tarea de buscar la fórmula para devolverle a este sector la dinámica.
La primera conclusión de la radiografía del sector que hace la Misión, dirigida por el excodirector del Banco de la República, Juan José Echavarría, es que de haber continuado así hoy la producción anual debería estar en 25 millones de sacos y no en 12. Este será el punto de partida del presidente Santos, quien analizará las recomendaciones.
La primera observación tiene que ver con el mecanismo que protege a los productores pequeños para que puedan vender su cosecha, el cual es calificado como “innecesario” por Echavarría que dice encontrar un alto nivel de competencia en buena parte de los municipios cafeteros y aconseja se mantenga solo en algunas zonas. Pero la FNC denuncia que el informe ignora el reto que es la comercialización para los pequeños por los altos costos y argumenta que de no existir la transferencia de precios internacionales al productor no podría ser superior a 90% (la Misión habla de 73%).
Con respecto a la estrategia de diferenciación de café la Misión concluye que hay que diversificar los cultivos para tener al mismo tiempo grano estándar y especial, ambos con elevada productividad. Sin embargo, la Federación contesta que para combatir la trampa de los commodities es fundamental estandarizar sobre una base de calidad mínima
En ese mismo tiempo se insiste en que no se regulen las exportaciones y que para vender al exterior no se pida más allá de los requisitos tradicionales y no se les obligue a reportarlo a la FNC, pero el gremio defiende que la exploración del negocio de granos especiales posicionaron la actividad en el exterior.
Frente al capital social los académicos advierten la necesidad de separar las funciones del Estado de las del gremio para que este último no termine financiando los bienes públicos y pierda así su foco en competitividad, lo que no cae bien en la Federación por considerar que “desestima el potencial de lo que se ha construido”.
Finalmente, cuestiona que el gremio se apalanque con los parafiscales que son recursos públicos y asegura que al ser una actividad comercial deben quedar sujetas al régimen tributario. A lo que Federacafé responde que la destinación de estos recursos es responsabilidad de un comité al que pertenece el Gobierno.
Qué pasa con la institucionalidad
La Misión retoma el debate sobre la institucionalidad actual y advierte que “está sobredimensionada y carece de transparencia. Además, con los años se ha vuelto excesivamente dependiente de los recursos públicos y podría convertirse en un problema latente para las finanzas públicas del país. Por estas razones es insostenible y debe reformarse”.
Incluso dentro de los miembros de Dignidad Cafetera está circulando un documento con siete preguntas respecto a la urgencia de reformar la Federación Nacional de Cafeteros que se ha discutido en varias reuniones.
Pero no son los únicos que se están moviendo, los cinco comités departamentales que recientemente divulgaron una carta ratificando la conveniencia de un relevo en la gerencia del gremio también han convocado encuentros. De hecho, miembros de dichas estructuras le manifestaron a LR que el ministro de Hacienda, Mauricio Cárdenas y el de Agricultura, Aurelio Iragorri, se encontraban en alerta ante una posible movilización.
Las opiniones
Eduardo Lora
Consejero del Dpto. de Investigaciones del BID
“La Federación juega demasiados roles que apuntan a objetivos que no coinciden, lo cual genera ineficiencia y falta de transparencia”.
Luis Genaro Muñoz
Gerente general de la Federación Nacional de Cafeteros
“Lora insiste en desmontar lo que llama “la institucionalidad” con lo que da libre espacio para que sea el mercado el que defienda a productor”.
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