Exportaciones de libros han caído 79% durante los últimos ocho años

La Cámara Colombiana del Libro presentó el informe ‘El Libro y la Lectura en Colombia’, que recopila información sobre la industria editorial y la comercialización de libros, entre otros temas, con cifras recogidas en los últimos ocho años. En el estudio, se resalta que aunque el sector tuvo un crecimiento general de 5,8% en 2016, el valor de las exportaciones ha venido cayendo de forma vertiginosa.

En 2008 las exportaciones de libros sumaron US$176,1 millones. Pero en 2016, esta cifra cayó 79% al reportar tan solo US$36,2 millones. Un comportamiento que deja una variación real negativa de US$20,3 millones en 2016. Enrique González, presidente de la Cámara Colombiana del Libro, dijo que, aunque el país ha disminuido sus exportaciones, las ventas revelan que la producción editorial se está asimilando en el mercado nacional.

Prueba de ello es que las ventas totales de libros en Colombia demostraron un crecimiento de 29% entre 2008 y 2017, alcanzando en este último año más de $696.000 millones. Lo que para el informe representa un fuerte trabajo de los diferentes actores de la cadena de producción y distribución editorial en Colombia, que habrían ayudado a amortiguar la caída gradual de las exportaciones.

Sin embargo, teniendo en cuenta las cifras del estudio, el mayor impacto para el comercio exterior de libros estaría en la crisis de Venezuela. En 2008, este país era el mayor comprador de textos colombianos con una participación cercana a 39%, por encima de países como México que tenía 12% de las exportaciones o Ecuador con 7%.

A 2016, Venezuela pasó a tener solo 6% de participación en las compras de títulos nacionales. Mientras que países como Ecuador, Panamá, México y Perú, comenzaron a ganar peso. No obstante, González considera que la caída en las exportaciones no solo viene desde la pérdida del mercado venezolano.

“Ahora se están vendiendo muchos más derechos que libros, y los derechos no le dejan al país el valor agregado por fabricación y fletes”. Una dinámica que se ha facilitado gracias al desarrollo de nuevas tecnología y libros digitales.

Pero, ¿quién recibe el mayor impacto por la caída de las exportaciones, cuando, contrario a lo esperado, la producción editorial se ha venido triplicando en los últimos 16 años? En el 2000, se registraron ante la Agencia Isbn 6.465 libros y en 2016, 17.939. Es decir, se están registrando en promedio 50 nuevos títulos cada día.

Para Ana María Aragón, cofundadora de la Librería Casa Tomada, la caída en las exportaciones hace que se pierda un mercado, pero no afecta a todos. “A nosotros como librería no nos impacta, porque no estamos vendiendo a Venezuela. Afecta es a las editoriales”, que son quienes producen y comercializan los libros físicos para la venta.

Carolina Rey, representante de la editorial Rey Naranjo, dijo que para las casas independientes la exportación de libros siempre ha sido compleja. “La crisis en Venezuela afecta es a los grandes grupos editoriales porque la relación de la industria independiente con Latinoamérica aún está comenzado”, aseguró Rey.

Además, consideró que falta mucha ayuda del Gobierno para exportar libros, un proceso que suele ser muy costoso.

Frente a esta situación, la Cámara recomienda, en sus conclusiones del estudio, incluir en la agenda a corto plazo del sector la internacionalización de la producción editorial nacional.

Las librerías siguen sin perder vigencia

Recordemos que uno de los debates del gremio editorial, hace algunas semanas, fue el cierre de la librería La Madriguera del Conejo, aparentemente por insolvencia económica. Sin embargo, el estudio reveló que este tipo de locales siguen siendo el principal canal de distribución de los libros en Colombia, con 28% de las ventas totales.

Cifra que sumada a las librerías de empresas editoriales completa 39% de participación. González considera que “son más las librerías que abren que las que cierran y hay mercado para todos”.