Estaciones de servicio se reordenarían por controles y sanciones más fuertes

Siendo así, algunos gremios que agrupan a los dueños de las estaciones de servicio han pedido al Gobierno, que antes de entablar y poner en marcha estas medidas es necesario que se tengan en cuenta varías consideraciones adicionales. Entre ellas la manera de hacer las inspecciones, ya que denuncian que varios de estos proyectos ponen en peligro la continuidad de casi 65% de las estaciones del país. 

Esto implicaría un cambio en el negocio del sector de los distribuidores, que empezaría a pasar de manos de empresas familiares a conglomerados empresariales como Terpel o Biomax, entre otras. Estos grandes grupos empresariales son los que cuentan con la capacidad para implementar los cambios que traería la reglamentación nueva.  

Las sanciones más fuertes se encuentran en el artículo 24 del Plan Nacional de Desarrollo que está en discusión. En este, se establecen multas de hasta de 2.000 salarios mínimos legales vigentes (antes era de máximo 20) y cierres de 90 días para las estaciones.  

Para Rafael Barrera, presidente de la Federación Nacional de Distribuidores de Derivados del Petróleo, Fedinpetróleo, solo una sanción de este tipo aplicada sobre una estación de servicio significaría el cierre total de 65% de las estaciones que existen en el país, ya que si se tiene en cuenta que 85% pertenecen a familias que tienen de a una o dos estaciones y no podrían cubrir esos costos. 

Dice que la SIC cae a los comercializadores, sin tener en cuenta que ellos distribuyen el producto que llega de los mayoristas, por lo que la carga debería ser compartida con las plantas de abastecimiento.   

Adicionalmente, explica Barrera que con el reglamento de buenas prácticas se pide que cada estación recoja una muestra del producto, la tenga disponible y la lleve a un laboratorio para el análisis. Por lo que para el experto Alejandro Martorell esto significaría casi, “que cada estación tenga un laboratorio para la reglamentación, lo que claramente es imposible ya que es un gremio de comerciantes y no de químicos. Adicionalmente, estas normas y controles tienen un costo, que termina recayendo únicamente en los distribuidores, cuando se sabe que la gasolina no nace en el surtidor y los problemas son heredados”.  

Siendo así, Barrera explicó que pidió al Ministerio de Minas y Energía una revisión de la reglamentación y un plazo para analizar las implicaciones que tendría en las estaciones del país.   

Finalmente, se habló de los cambios a la mezcla de gasolina, la cual actualmente es 8% de etanol pero podría pasar a ser 13,8% por nuevas destilerías como explicó Jorge Bendeck, presidente de Fedebiocombustibles, lo cual, según Barrera, no se debe hacer sin un estudio adecuado, ya que una mezcla mayor podría dañar los motores de los carros y generar problemas ambientales. 

Más estudios para beneficiar a toda la cadena
Para los distribuidores minoristas este es un momento muy difícil para el sector, ya que sumado a los controles y sanciones, los distribuidores mayoristas también están entrando a competir en la distribución minorista del combustible aprovechando que en el país no hay una ley que no permita que una empresa pueda estar en toda la cadena. Siendo así, los márgenes que tienen los mayoristas les permite que puedan bajar mucho más el precio de la gasolina, lo que según estudios de Fedinpetróleo ya está generando que en varios corredores del país la competencia sea muy difícil.

Las opiniones

Rafael Barrera 
Presidente Fedinpetróleo 
“Los controles y las sanciones recaen únicamente sobre los distribuidores minoristas y se olvida que el combustible no viene únicamente del surtidor, sino de los mayoristas y transportadores”.

Jorge Bendeck 
Presidente de Fedebiocombustibles 
“Las mezclas más ricas en etanol serán posibles en 2015 con la apertura de una destilería de 400.000 litros por día de Riopaila Castilla, y una planta de 475.000 litros diarios de la petrolera estatal Ecopetrol en el 2016”.