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La entidad también informó que, al cierre de julio de 2025, el saldo de Títulos de Tesorería en su poder ascendió a cerca de $30.140 millones.
El Emisor indicó que, aunque la inflación se redujo en los últimos meses, durante los primeros meses de 2025, el indicador anual detuvo su tendencia decreciente
El Banco de la República reportó que, para julio de 2025, efectuó compras definitivas de Títulos de Tesorería tipo B (TES B) en el mercado por un valor de $1.999,7 millones. Estas adquisiciones se realizaron con el propósito de responder a la diferencia entre la oferta y la demanda de la base monetaria, según explicó la entidad, tras las proyecciones efectuadas, con el objetivo de mantener el indicador bancario de referencia en línea con la tasa de intervención de política monetaria fijada por el propio banco (9,25%).
La entidad también informó que, al cierre de julio de 2025, el saldo de Títulos de Tesorería en su poder ascendió a cerca de $30.140 millones, y que en agosto de 2025 no se registraron vencimientos de estos títulos. Agregó que, en el mercado cambiario, no efectuó compras ni ventas de divisas.
Ese mismo día, se publicó el informe de la Junta Directiva del Emisor al Congreso de la República. En el documento se indicó que la inflación anual mostró una tendencia a la baja en el último año, oscilando entre 5,1% y 5,3%.

Para junio, la inflación descendió a 4,8%, lo que estaría en línea con la meta de ubicar este indicador macroeconómico por debajo de 3%. Además, se señaló que la economía colombiana creció 2,7% en el primer trimestre.
Pero en un contexto de anuncios arancelarios de EE.UU., tensiones geopolíticas, presiones inflacionarias globales y niveles similares de inversión extranjera directa entre enero y mayo de 2025 frente al mismo periodo de 2024, el Emisor advirtió que persisten retos importantes.
También señaló que, aunque la inflación se redujo en los últimos meses, durante los primeros meses de 2025 el indicador anual detuvo su tendencia decreciente.
En cuanto a la demanda interna, indicó que el consumo de los hogares se vio impulsado por el aumento del salario mínimo, el turismo, mayores remesas, un crecimiento notable del consumo y los altos precios del café. Por su parte, el consumo público creció 1,9% anual.
La inversión de capital fijo permaneció estancada debido a las caídas en sectores como construcción de vivienda y otras edificaciones. En el comercio exterior, las importaciones aumentaron 12,4% anual, mientras que las exportaciones crecieron 0,7%, lo que generó un impacto negativo en la demanda externa neta y en la variación del PIB, según el Banco de la República.
El informe destacó que las actividades terciarias lideraron la expansión económica, con un mayor dinamismo en los servicios artísticos y de entretenimiento, así como en las actividades agropecuarias relacionadas con la ganadería y el café. Esto permitió proyectar que la economía mantuvo un buen ritmo durante el segundo trimestre de 2025.
El banco resaltó que el empleo ha continuado creciendo en lo que va del año, con la creación de 788.000 puestos de trabajo, impulsados por un mayor dinamismo en ciudades intermedias y pequeñas. No obstante, la informalidad volvió a aumentar en mayo, alcanzando 56,1%.
En materia fiscal, se indicó que el déficit general fue de 5,8% del PIB en 2024, lo que significó un alza de 3,1 puntos porcentuales frente a 2023. Se evidenció un deterioro en los balances del Gobierno Nacional Central, del subsector de seguridad social y de otras entidades del nivel central, expresó la entidad.
De acuerdo con las proyecciones del Marco Fiscal de Mediano Plazo, divulgadas por el Ministerio de Hacienda, la Junta prevé un déficit fiscal de 7,1% del PIB en 2025, debido a una mayor carga por intereses, junto con un déficit primario de 2,4%. Para 2026, el déficit se ubicaría en 6,2%, proyección que depende en gran medida de la aprobación de la reforma tributaria con la que el Gobierno busca recaudar cerca de $26 billones.
En cuanto a la deuda neta del Gobierno Central, el Emisor prevé que aumente de 53,4% del PIB en 2023 a un máximo de 63% en 2026. Por esta razón, el Consejo Superior de Política Fiscal, Confis, aplicó la cláusula de escape de la Regla Fiscal, con el fin de evitar el incumplimiento de la ley entre 2025 y 2027. Según el Banco de la República, durante este periodo el déficit total del Gobierno Central podría llegar a 3,1% del PIB en 2028 y promediar 2,8% del PIB entre 2029 y 2036.
En cuanto a las reservas internacionales, estas alcanzaron más de US$65.100 millones, lo que representó un aumento de más de US$2.600 millones en lo corrido de 2025.
El Emisor explicó que la rentabilidad de las reservas se debió a la valorización de las inversiones, impulsada por la disminución de las tasas de interés a corto plazo en los principales mercados, así como por la apreciación de otras monedas de reserva frente al dólar estadounidense, concluyó la entidad.
Desde la entidad añadieron que se deben tomar precauciones debido a que por la temporada se puede ver un aumento
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