“El país ha pecado en la fe excesiva en el mercado y en los empresarios”

¿Cómo ha visto el comportamiento económico del país?
Es importante hablar desde la apertura y la globalización, que es un proceso que comenzó anterior a los 90. Colombia y los países de la región lo adoptaron en los 90. El tema con la apertura, uno no puede decir que es absolutamente mala o buena, ha sido más buena para unos que para otros. Hay países que se han beneficiado por encima de otros.

En un contexto más cercano, ¿cómo ve el panorama actual?
Ahora de 2015 para acá, la economía está en un punto bajo, pero no solo ésta, sino todas las de América Latina, sobre todo Suramérica. Pero el país ha mantenido el comportamiento, no ha sido ruidoso como Venezuela que tiene una inflación muy alta. Lo de Colombia está en el contexto normal de las economías.

¿Cree que ha sido buen manejo del Gobierno?
El arte de un Gobierno es saber manejar los momentos. Me explico, cuando hay mucho financiamiento internacional, muchas veces los gobiernos se sobreendeudan y sobre invierten, porque es fácil conseguir un préstamo. Ahí entramos a ver un poco la discusión de si el ‘boom’ minero-energético fue bien manejado. 

¿Y en su opinión fue bien manejado?
En Colombia, el sector de la minería siempre ha estado, no era el más importante, pero en este periodo (2012 y 2014) sí se volvió el más destacado, en las exportaciones por lo menos. Entonces hubo un desplazamiento en la parte comercial, dejando a la agricultura y la industria de lado. Ahí claramente se registró una enfermedad holandesa.

¿Qué aspecto se le puede criticar al manejo económico?
Me parece que el país ha pecado en la fe excesiva en el mercado y los empresarios. No es que yo sea enemigo de los empresarios, pero lo que uno no puede esperar es que el mercado y los empresarios siempre estén dispuestos a reaccionar bien y que tengan la capacidad de respuesta.

¿Cómo vio la Reforma Tributaria del año pasado?
Yo veo que el Gobierno ha hecho esfuerzos, ha ido ajustando. Claro que la Reforma no fue todo lo que se esperaba; lo de las empresas no es cierto, las compañías no están tributando más allá de lo que correspondería, los colombianos tampoco; el IVA de 18% sí es alto. Esto agregando el proceso de paz, ha generado que el entorno interno se ha enrarecido. 

Hablando de posconflicto, ¿cómo cree que se puede financiar? ¿con gasto? ¿con deuda?
Para el posconflicto se necesita que la economía se ponga saludable. Además, hay que aprovechar nuevos espacios económicos como el turismo. Para la financiación, se puede trabajar en la evasión y los impuestos que en las áreas rurales no se pagan, así como ampliar la base tributaria.

Se están empezando a discutir la reforma pensional, ¿usted cómo ve el tema?
La reforma pensional es urgente, yo creo que es así. Hay subsidios inadmisibles, por ejemplo el de las pensiones. Pero yo creo que hay que hacer una reforma a la educación, pero buena, como cadena de valor, es decir toda.

¿Qué deficiencias ve para hacer esta propuesta?
Le voy a poner un ejemplo sencillo. De los estudiantes que pasan a la Universidad, 85% tienen que ser nivelados en matemáticas y en lenguaje 40%.

¿Qué tanto aportan las universidades a la economía?
Las empresas tienen que acercarse a las universidades, a las públicas y privadas, no a Los Andes. Eso me parece terrible, una sociedad en donde solo creen en los que salen de un lugar. No tengo nada en contra de Los Andes, es una buena universidad, igual que esta.

La opinión

Sergio Olarte
Analista macroeconómico de BTG Pactual
“Estamos encontrando la justa mezcla entre la intervención del Estado y dejar al mercado que aproveche las ventajas competitivas que este tiene. Aunque los extremos son malos”.

(Encuentre adjunto la entrevista completa a Édgar Bejarano, decano de la Facultad de Ciencias Económicas de la Universidad Nacional)