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En el puerto de Barranquilla, la Dian descubrió siete contenedores con mercancía de contrabando proveniente de China, avaluada en $10.000 millones. Entre los artículos que se pretendían ingresar había: accesorios para celulares, confecciones y textiles, calzado deportivo de marcas conocidas, whisky como Sello Azul, Buchanan´s, Chivas Regal y perfumes de marcas altamente comerciales.
Esta incautación no produjo capturas, sin embargo ya hay una investigación en curso para identificar las empresas responsables del cargamento. “Estas organizaciones serán denunciadas penalmente ante las autoridades competentes, a fin de esclarecer y sancionar a como dé lugar el atentado contra el buen ejercicio del comercio exterior en esta zona del país”, indicó la Dian.
Según indica esta entidad, es un “evidente negocio abierto” puesto que en la declaración del documento de importación se indicaba la procedencia de artículos de metal y acrílico, lo cual no sirvió para despistar a las autoridades.
Para el capitán de fragata, Jorge Eduardo Castillo Santos, “el éxito de esta operación se debió a las “instrucciones claras y precisas del ministro Mauricio Cárdenas y del director nacional de Dian, Juan Ricardo Ortega, de erradicar el contrabando y respaldar a los comerciantes honestos”. Los responsables directos de esta operación fueron la Armada Nacional y el grupo de Análisis y Perfilamiento de Riesgo (Gaper) de la Aduana de Barranquilla.
El Gobierno creó el Programa de Confianza Mutua, por medio del cual se promueve denunciar a los comerciantes que incurren en prácticas de contrabando.
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