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La idea es que todos los ciudadanos hagan un seguimiento de los consumos históricos que tienen a través de sus facturas para poder identificar el volumen de agua que consumen y así saber si están haciendo un desperdicio del líquido.
“Hay que aclarar que el consumo excesivo se calculará duplicando el consumo promedio que reporta una ciudad determinada”, explicó el ministro de la cartera, Luis Felipe Henao, quien agregó que cada ciudad tiene un cálculo de consumo promedio de acuerdo con su piso térmico y la cantidad de agua que requiere.
Así que para resumir, la idea es que en ciudades por encima de 2.000 metros sobre el nivel del mar (msnm), que tienen un consumo promedio de 13 metros cúbicos por mes, se multiplique por dos. Entonces, el consumo excesivo se daría si se gasta por encima de 26 metros cúbicos mensuales.
En ciudades entre 1.000 y 2.000 msnm el promedio es de 14 metros cúbicos y la sanción vendría a partir de 28 metros cúbicos mensuales. Y las ciudades por debajo de 1.000 msnm, con promedio de 16 metros cúbicos, el exceso vendrá por encima de 32 metros cúbicos.
Partiendo de eso, las sanciones se empezarán a cobrar por cada metro cúbico consumido por encima de ese límite. Es decir, desde ese punto se cobrará al doble del costo de referencia de su factura cada metro.
Por otra parte, los departamentos que quedaron excluidos, por tener diferentes condiciones climáticas, son Amazonas, Caquetá, Chocó, Guainía, Putumayo y Vaupés, dijo el Ministro.
Finalmente, Henao explicó que las empresas prestadoras del servicio de acueducto podrán determinar por municipios en que lugares se establece la medida y más importante “se les solicitará un plan inmediato para disminuir las pérdidas de agua en zonas de emergencia y, de acuerdo con la regulación, el control de pérdidas será más agresivo en términos de vigilancia y control porque les va a exigir más eficiencia para que realicen actividades y correctivos para disminuir las pérdidas”.
Recomendaciones adicionales para las autoridades
De igual manera, el Ministro de Vivienda, señaló que las autoridades locales y municipales deberán ejecutar programas sobre el uso eficiente del agua, “que incluyan campañas de sensibilización de la población para ahorrar el preciado líquido del consumo humano y evitar el desperdicio en ocasiones como lavado de carros y plantas o el uso desmedido a la hora del baño o aseo del hogar”. Y concluyó explicando que la activación de los Planes de Emergencia y Contingencia será responsabilidades de los entes territoriales.
Entre las medidas se encuentra que, cualquier usuario residencial que consuma más de 44 metros cúbicos en el bimestre, es decir, 22 metros cúbicos al mes, será sancionado
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