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Se trata del Contrato de Protección de Precio de la Federación Nacional de Cafeteros, por medio del cual los cafeteros podrán adquirir contratos para fijar el precio de la carga en el segundo, tercero y cuarto mes posterior a la fecha de toma del instrumento, cubriendo el riesgo del 100% de su cosecha, con un límite máximo de 50 cargas por mes.
Según el gremio cafetero, el Contrato de Protección de Precio (CPP) está diseñado como un instrumento flexible, dirigido a todos los cafeteros del país, al que pueden acceder desde sus fincas a través de herramientas tecnológicas.
“De esta forma, esperamos que los productores no solo puedan optimizar su productividad y costos a través de los exitosos programas de renovación en curso, sino, aprovechar la volatilidad y las coyunturas de precio favorables que les garanticen un ingreso mínimo escogido por cada caficultor”, dijo Luis Genaro Muñoz Ortega, gerente General de la Federación Nacional de Cafeteros
Muñoz Ortega explicó que el nuevo instrumento permite a los productores protegerse en el corto plazo contra movimientos bruscos del precio internacional o de los comportamientos negativos de la tasa de cambio, dos variables fundamentales a la hora de determinar el precio interno del grano.
Con tan solo una llamada el productor podrá fijar el precio mínimo al cual venderá su café
El CPP está diseñado como un instrumento flexible, dirigido a todos los cafeteros que tengan Tarjeta o Cédula Cafetera Inteligente y que vean en esta herramienta financiera una oportunidad para proteger sus ingresos ante eventuales caídas del precio internacional o comportamientos negativos de la tasa de cambio.
Al realizar la llamada desde su teléfono celular, el productor podrá escoger tres opciones de precio garantizado: el precio de mercado del día de la llamada, un precio 10% superior y/o un precio 10% inferior. Cada una de estos precios mínimos garantizados tiene un costo o prima diferente, el cual será descontado inmediatamente de la Cédula Cafetera Inteligente, sin necesidad de ningún desplazamiento.
El productor podrá confirmar desde su finca el precio y el volumen de cargas que quiere proteger.
Como se trata de garantizar un precio mínimo a través de un contrato de protección, si el precio sube en el momento en que el productor vende su cosecha, la opción no se ejerce. Ahora bien, si por el contrario baja, el productor tendrá garantizado un precio mínimo.
“Los productores han venido realizando una transformación en la estructura productiva de sus fincas a través de los programas de reconversión que los harán más eficientes y con este nuevo instrumento complementarán las iniciativas de productividad en finca con una estrategia de ventas y de aprovechamiento de precios que les permitan garantizar la rentabilidad de su actividad”, agregó Muñoz Ortega.
El gerente del gremio cafetero hizo un llamado a los caficultores para que aprovechen la utilización de este instrumento como un mecanismo real de defensa de su ingreso y no acudan a la retención del café en sus fincas o en las cooperativas a la espera de precios más altos.
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