Barranquilla, vamos por el camino correcto

En el más reciente informe sobre calidad de vida, publicado en noviembre pasado, Barranquilla Cómo Vamos analiza la evolución de nuestra ciudad en 13 temáticas durante el periodo 2008 - 2016. En términos generales, el informe entrega un balance positivo sobre el desarrollo reciente de ciudad, destacando la reducción de la pobreza a la mitad entre 2008 (43,3%) y 2016 (21,7%) la más rápida en el país, un aumento del número de ocupados de 635.000 a 913.000 durante el mismo periodo, y un incremento de los ingresos de los hogares a una tasa de crecimiento promedio anual de 7,6%, que permitió que Barranquilla presentara la reducción de la desigualdad más acelerada de Colombia, todo esto basándose en cifras Dane; avances que sin duda son fruto del aprendizaje institucional, continuidad en una visión de ciudad, y una gestión fiscal eficiente.

Durante el periodo de estudio los ingresos totales del Distrito se duplicaron, al crecer en términos reales a un promedio anual de 13%, lo que permitió que la inversión pública en 2016 se ubicara en $1,7 millones por habitante, la más alta entre las principales ciudades del país. Este aumento de recursos se reflejó en la diversificación sectorial de la inversión entre 2008 y 2016, pasando de concentrarse en sectores dependientes de las transferencias de la nación, a incluir una mayor participación en equipamiento urbano y promoción del desarrollo; permitiendo entregar nuevas soluciones que han influido en la calidad de vida de los barranquilleros como lo han sido los 108 parques reconstruidos, la canalización de 9 arroyos (6 en proceso), el primer tramo del Gran Malecón, las nuevas sedes del Sena, entre otras.

La nueva cara de la ciudad también ha implicado un ejercicio juicioso en la sostenibilidad financiera, y en el cual quisiera complementar las conclusiones a las que llegó el estudio de Barranquilla Cómo Vamos: en los últimos nueve años los recursos comprometidos (deuda y vigencias futuras) en comparación con los ingresos anuales del Distrito ha disminuido considerablemente, mientras que a finales de 2007 la relación era de siete veces, hoy es 1,25 veces. Esto quiere decir que ejecutamos inversiones siendo financieramente responsables, lo cual ha sido reconocido por la calificadora internacional de riesgo Fitch Ratings, la cual otorgó a la ciudad la calificación AAA, la más alta que puede recibir una entidad pública en Colombia, y además entregó una calificación internacional, en donde deja a la par a Barranquilla con el riesgo país ante entidades financieras en el extranjero.

Este escenario financiero positivo nos permite seguir trabajando por Barranquilla y enfocarnos en resolver los nuevos retos que nos deja el desarrollo, como lo son la seguridad y la movilidad. También tenemos claro que nuestros esfuerzos deben dirigirse a consolidar las bases que permitan mantener los logros y encontrar el vehículo que impulsen la prosperidad económica que sustente el desarrollo de la ciudad en el mediano plazo.

Queremos que Barranquilla sea cada vez más incluyente en términos sociales, económicos y urbanos, permitiendo que todo ciudadano sin importar en qué barrio viva, estudie o trabaje, tenga asegurado el acceso a todos los bienes y servicios públicos que ofrece la ciudad. La buena noticia es que lo estamos logrando y el informe de Barranquilla Cómo Vamos da cuenta de ello.