Un reconocimiento al vecino más querido

Las tiendas de barrio han sido la puerta de entrada de varias empresas a la cultura colombiana, siendo estas, en su principio, la base del consumo masivo de los hogares colombianos. Es tanta su relevancia que, de acuerdo con cifras de Fenalco, a nivel nacional, el teaté (también conocidos como TAT o tienda a tienda) mueve cerca de 60% de las ventas de producto, superando incluso a los almacenes de cadena y las grandes superficies.

A pesar de la fortaleza que han tomado los hard discounters -o supermercados de descuento duro- en el mercado nacional, los canales minoristas -como las tiendas de barrio- mantienen un papel protagónico y sobreviven por ser “el vecino de confianza” en el que se encuentra desde el arroz para el almuerzo hasta el chance, las recargas de telefonía móvil y el Soat.

La evolución del mercado y las necesidades de los colombianos han sido el camino para la consolidación de estos establecimientos, en los que los tenderos han llegado a ser el amigo, el vecino o el microempresario que le provee al ciudadano del común todo lo que necesita en un mismo lugar.

Se podría pensar que la llegada de grandes empresas internacionales desplazaría a los pequeños emprendimientos de los barrios, sin embargo, existe una relación adquirida de confianza que apalanca su supervivencia. En este mismo sentido, el Gobierno, en nombre del MinTIC, ha desarrollado ‘Tendero Digital’, una herramienta para apoyar la administración de los pequeños negocios y tener más control de las ganancias con el fin de promover la transformación digital y generar un crecimiento en su gestión.

De esta manera, las empresas como Gelsa no pueden desconocer la relevancia que tienen las cerca de 200.000 tiendas de barrios tradicionales que hay en el país. Por ello, se han establecido varias acciones para compensar económicamente su gestión, brindándoles más posibilidades de ingreso con servicios que van desde giros hasta diversas modalidades de apuestas. De hecho, este canal mueve en Bogotá y Cundinamarca alrededor de $6.000 millones en chance cada día, hecho que genera un impacto directo para el sector salud, beneficiándose con millonarios recursos por los derechos de explotación de los juegos de suerte y azar.

Son muchos sectores los que se favorecen con la existencia de este canal, por ejemplo, la industria de bebidas y comidas, que -según cifras también de Fenalco- representan de 65% a 68% de su distribución total por canal. Por nuestra parte, solo en julio, la alianza estratégica que tenemos con más de 5.000 tenderos nos permitió atender más de 170.000 transacciones diarias en las 20 localidades del distrito capital y en los 116 municipios del departamento. Estas cifras son un motivo para velar y trabajar en pro del cuidado y conservación de los queridos tenderos que aportan significativamente al desarrollo económico del país.

Finalmente, nos queda agradecerles a todos los tenderos por contribuir con el crecimiento de nuestro sector. Sabemos que más de 90% de ellos trabajan de manera informal y que este es uno de los retos más grandes que tiene el país. De modo que nuestra responsabilidad como empresa es continuar generando alianzas para atender a todos los ciudadanos.