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En Semana Santa, según datos de años anteriores, el consumo de pescado suele aumentar 60%, en promedio.
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Dentro de las especies que más se consumen por estas fechas destacan la mojarra, el pescado seco, el bagre rayado del Magdalena, entre otras
El miércoles 14 de febrero, además de haberse celebrado San Valentín, comenzó una época de año muy importante para los católicos, la Cuaresma, el tiempo del año en el que se preparan para la Pascua.
Así como su nombre lo indica, lo que se conoce como Cuaresma, es una temporada de 40 días en la que los fieles hacen ciertas actividades con el fin de prepararse para otro momento relevante en la iglesia católica, y parte de esta preparación consiste en cambiar algunos hábitos alimenticios por ciertos días de la semana.
No comer carne los viernes de la Cuaresma es una de las prácticas que se ve en varios de los católicos, la misma que lleva a que haya mayor disponibilidad de pescado durante esa temporada, y consigo, mayor consumo, pues se convierte en la alternativa perfecta, que se extiende hasta la Semana Santa.
Ante esto, desde hace varios años se llevan reportes de cuánto pescado suele haber disponible por estas fechas y en cuánto incrementa el consumo, y aunque todavía no se publican los datos de 2024, el Ministerio de Agricultura tiene cifras importantes de fechas anteriores.
En cuanto a las especies que más se consumen por estas fechas, según el Ministerio, destacan la mojarra, el pescado seco, el bagre rayado del Magdalena, la picuda, el mero, entre otras.
Y precisamente en Semana Santa, según datos de años anteriores, el consumo de pescado suele aumentar 60% en promedio si se compara con otras semanas del año.
Sin embargo, en 2022 la Autoridad Nacional de Acuicultura y Pesca, Aunap, comentó que "el liderazgo en consumo por volumen de habitantes, se evidencia por la demanda al por mayor de 50% más de estos productos cada viernes desde que comienza la época de Cuaresma; pero esos aumentos alcanzan su cúspide los días santos cuando llegan a representar hasta 70%".
Vale la pena mencionar que se estima que, del total de la producción para años anteriores en Semana Santa, 15% fue de pesca artesanal, 24% de pesca industrial y 61% de cultivo.
Ahora, en el caso de 2023, según la cartera, Colombia contó con 30.000 toneladas de pescado, tan solo para Semana Santa, y es que, según la Aunap, durante dicha semana los colombianos suelen consumir entre tres y cuatro veces más pescado de lo habitual.
Para el año pasado, la disponibilidad para la Semana Santa fue producida por los 125.000 pescadores y 3.745 acuicultores formalizados en el país, que recibieron apoyo consistente en aparejos de pesca, capacitación en buenas prácticas pecuarias y equipos para la comercialización.
Por ahora, resta conocer cuáles serán los datos oficiales para este año, y si el consumo de esta proteína aumentará respecto a los pasados.
