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PODEROSOS EN EL PALACIO DE LIÉVANO

martes, 14 de febrero de 2012

Aunque se dijo que el hombre que le hablaba al oído al alcalde de Bogotá, Gustavo Petro (1960), era Antonio Navarro (1948), la verdad es que hay alguien más. Se trata del publicista Daniel Winograd, a quien no hay secretario que no le llame y le consulte casi cada decisión que piense tomar. Otra influencia grande sobre Petro la ejercería el exalcalde Antanas Mockus, más ahora cuando su esposa, Adriana Córdoba, será la Veedora Distrital.