Se espera que le economía tenga mejor ritmo de crecimiento

Todo se refleja en decisiones que se empezaron a tomar antes de las 12 uvas del 31 de diciembre. Se destaca, por ejemplo, el inicio del ciclo de disminución de tasas de interés por parte del Banco de la República, algo que sorprendió a los agentes del mercado financiero. 

“Para la economía colombiana viene como una bocanada de aire fresco esta decisión de bajar las tasas de interés pues ayuda a estimular la demanda y la actividad económica. Le va ayudar enormemente al aparato productivo, 2017 va ser un mejor año, de más crecimiento, porque vamos a tener los efectos de las menores tasa de interés”, precisó el ministro de Hacienda, Mauricio Cárdenas.

Y es que 2016 pasará a la historia como el año de la desaceleración y el reacomodo de la economía ante la caída de los precios del petróleo. Dicho descalabro le costó en ingreso al fisco $23 billones, razón por la que en enero entrará en vigencia la reforma tributaria que sancionó el Congreso antes de Navidad. 

Justamente ese será uno de los principales retos para la actividad económica puesto que, por un lado, se deberá empezar a sentir el alivio en la carga tributaria a las empresas. Pero en otra orilla estará el impacto de los consumidores con el incremento de tres puntos en el IVA a 19% y en los mayores controles que hará la Dirección de Impuestos y Aduanas Nacionales (Dian) para luchar contra la evasión. 

Pero a eso se suma también la mejora que registró la balanza de pagos al tercer trimestre de 2016 y que ratifica la senda de reducir el déficit de cuenta corriente. Según el Banco de la República la cuenta corriente presentó un déficit de US$3.434 millones, equivalentes a 4,77% del PIB. En el análisis realizado por Bancolombia, esto representa un importante ajuste frente al déficit observado hace un año cuando se ubicó en US$5.223 millones o 7,6% del PIB.

“Aunque se ha moderado ligeramente en la cuenta corriente se sigue destacando el buen comportamiento de las transferencias corrientes netas, cuyo superávit pasó de 2,2% del PIB en el tercer trimestre de 2015 a 1,9% del PIB en el mismo período de 2016, como producto de un menor giro de remesas de los colombianos que residen en el exterior”, señaló el informe.

Y otro elemento que se resaltaba es el control de la inflación para el próximo año, según las estimaciones recogidas por el Banco Central, la inflación para el próximo año se podría  ubicar en 4,36% y en 2018 los precios al consumidor podrían estar más cerca de la meta de largo plazo al situarse en 3,58%. 

Según Andrés Pardo Amézquita, director ejecutivo de Investigaciones Económicas de Corficolombiana, “la economía colombiana crecerá 2,8% en 2017, frente a 1,9% en 2016, y explica que los principales factores que explican este pronóstico son: un aporte significativo de la inversión de los proyectos viales de 4G; un aporte positivo de la inversión de capital de las empresas petroleras al crecimiento del PIB; un mayor crecimiento del gasto público; un debilitamiento moderado del gasto de los hogares”.

Nueva estrategia para diversificar las exportaciones 

El mal momento que tuvo la balanza comercial de Colombia por cuenta de la caída de las exportaciones minero energéticas parece ser tema del pasado. 

La razón es que la economía ha venido teniendo un comportamiento de ajuste en el que las importaciones también presentaron una corrección, en parte explicada por la devaluación del peso frente al dólar. 

“Las menores importaciones también deben estar reflejando la mayor competitividad de la producción nacional, entre otros, por la devaluación del peso y la entrada en operación de Reficar”, dijo la ministra de Comercio, Industria y Turismo, María Claudia Lacouture.

De acuerdo con el Departamento Administrativo Nacional de Estadística (Dane), las importaciones en octubre se contrajeron 20% y, de este modo, explica el Gobierno, se sigue reduciendo gradualmente el déficit comercial. 

Solamente en octubre bajó 49,6% en relación con igual mes de 2015, al pasar de US$1.522 millones a US$766 millones. Entre enero y octubre el déficit se redujo 21,5%, al pasar de US$12.822 millones en ese periodo del 2015, a US$ 10.066 millones este año. Según un análisis realizado por Bancolombia, dentro de los componentes de la balanza comercial, “se evidenció una reducción tanto de las exportaciones como de las importaciones, pero estas últimas cayeron a un mayor ritmo”. 

En tanto, Alianza Valores considera que el resultado explicado por un recorte en las importaciones realizadas por el país son un reflejo de la desaceleración de la economía local. 

Uno de los mayores retos que tendrá el comercio exterior del país es la reducción de los costos logísticos para mejorar la competitividad. De acuerdo con Asoexport, el país debe procurar una reducción en los costos logísticos que permita mejores ingresos para los productores en el campo.

Por eso, la estrategia del Gobierno Nacional es la implementación de los corredores logísticos dentro del marco del plan maestro de transporte. 

La idea es que para 2017 el plan inicie con los gerentes de los seis corredores logísticos (Bogotá-Buenaventura, Medellín-Villavicencio, Bogotá - Cúcuta - Caribe, Bogotá - Caribe, Rumichaca - Caribe, Medellin- Cúcuta), quienes deberán velar por la implementación de las soluciones y la fluidez de los corredores.

Otro punto neurálgico que mejorará en el mediano plazo el comercio exterior es el de los accesos a las ciudad. Al respecto, el ministro de Transporte, Jorge Eduardo Rojas, señaló que “es evidente que estos han sido un obstáculo para la eficiencia logística y que deben articularse con la red nacional. Por eso, se analizaron 38 ciudades del país y 160 accesos, bajo tres dimensiones: velocidad, volumen vehicular y expansión urbana”.

Lo anterior se articula con los programas de incentivo a la exportación que lidera el Ministerio de Comercio en el que se realizan las seis cadenas de valor priorizadas que se han definido de manera concertada con las regiones son metalmecánica, químicos, industria, sistema moda, agroalimentos y turismo.

“Pasamos de 1.400 productos a seis cadenas de valor que tienen potencial en estas regiones para aumentar la productividad. Esto estará impulsado en una política de comercio exterior, encadenamientos productivos y valor agregado en las materias primas”, afirmó  Lacouture. 

Ahora bien, con un incentivo al consumo con la reducción de tasas de interés, la balanza comercial también sentirá el efecto de una mayor demanda interna. 

Dólar seguiría en alza por efecto de la Fed 

Uno de los mayores hechos que impactará el comportamiento de la tasa de cambio en Colombia en el próximo año es  la reunión del comité de política monetaria de la Reserva Federal de Estados Unidos con las posibles alzas de interés que pueda realizar a lo largo de 2017. 

En un balance realizado por Bancolombia, 2016 ha sido reseñado como un período de alta volatilidad con tiempos de depreciación considerable -no olvidar que el dólar llegó a los $3.300 en el primer trimestre- y otra de correcciones también muy marcadas con una revaluación que llegó a los $2.800 en septiembre. “En 2017 el balance de estos factores cambiaría, ya que la paulatina recuperación de los indicadores macroeconómicos de Colombia contrastará con un mercado global volátil y sujeto al rumbo de las tasas de interés en Estados Unidos”, agregó la entidad. De esta manera, la tasa de cambio seguirá cerca de $3.000.