La mayoría de los comentarios son versiones condensadas de textos más largos.
Nuestra compañía se estableció en Chipre en 2002 y desde entonces ha estado vendiendo comida congelada. Fuimos seducidos al país por una excelente campaña de publicidad lanzada por el gobierno que subrayaba la estabilidad política y económica del país, lo fácil que era abrir un negocio y los bajos impuestos corporativos. Trabajamos duro y crecimos; creamos empleo, usamos servicios locales, pagamos alquileres y nuestros impuestos.
Nuestra compañía no está ocultando dinero en un paraíso fiscal del exterior, y nuestros accionistas han optado por reinvertir en la compañía las ganancias acumuladas en lugar de llevarse sus dividendos. Ahora me sorprende escuchar que el gobierno, que nos ha estado cobrando impuestos durante 10 años, quiere confiscar un porcentaje del dinero que tuvimos la mala suerte de tener en cuentas bancarias de la compañía cuando cerraron los bancos.
No es dinero nuestro – es dinero de clientes de todo el mundo que nos pagaron y están esperando la entrega de productos.
Necesitamos este dinero para pagar a nuestros proveedores, a nuestras compañías de transporte, a nuestros empleados, nuestras cuentas e incluso para pagar impuestos al gobierno.
– Nik, Chipre
Para enfrentar la situación de Chipre, el Eurogrupo tuvo la inteligencia de sugerir una combinación de los caminos seguidos por Islandia e Irlanda. Al Estado chipriota se le cobrará para salvar a los grandes bancos, y la nación experimentará los efectos de la austeridad (y vigilancia externa), como Irlanda. Al mismo tiempo, los bancos serán salvados de la bancarrota con quitas a los depósitos (esto no es exactamente similar al caso de Islandia, aunque el plan tendrá los mismos resultados sin los beneficios).
¿Es una locura? Absolutamente. ¿Y qué explica esta demencia? La convicción de Berlín de que Chipre estaba en el camino equivocado y que sus pecados deben ser castigados.
– J., Grecia
Esto es lo que olvidaron los banqueros chipriotas: el que cena con el diablo debe usar una cuchara muy larga.
– P. M., Gran Bretaña
Esta crisis fue iniciada por políticos, principalmente por políticos griegos que usaron una contabilidad cuestionable para endeudarse con dinero de otra gente y seguir gastando en programas sociales, asegurando así votos para quedarse en el poder. Ahora la crisis está siendo agravada por otros políticos como Angela Merkel, la Canciller alemana, quien insiste en recortes en el gasto para asegurar votos y que pueda quedarse en el poder. Todo es tan cínico.
Los ciudadanos están atrapados en este embrollo porque confiaron en políticos.
- N., Chipre