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Con la adopción de la factura electrónica, la Dian está validando cerca de 5 millones de facturas electrónicas diarias, el doble de Chile, de las cuales el 60% corresponde a operaciones a crédito. Así mismo, el Factoring en papel y hasta ahora unas incipientes operaciones de cesión de derechos de facturas electrónicas, ascienden a cerca de US$8,5 millones, aproximadamente la cuarta parte de Chile.
Chile tiene implementado el registro para la cesión de derechos económicos de las facturas electrónicas desde 2005, año en el cual cedió sus primeros cuatro documentos. Durante 2020, mediante este registro, en ese país se cedieron cerca de 5 millones de documentos; equivalentes a tan solo dos días promedio de emisión de facturas electrónicas, por cerca de US$35 millones. Ticket promedio de US$7.000 por operación de cesión.
Con esa simple comparación podemos notar que, el potencial de desmaterializar todas las operaciones de papel en electrónicas sumado a que en Colombia recibimos el doble de facturas electrónicas que nuestro hermano país Chile, estamos ante un escenario de crecimiento exponencial del factoring electrónico.
Sigamos sumando, para dibujar la oportunidad de la que estamos hablando. El Factoring de papel en Colombia está concentrado en los buenos pagadores, riesgo bajo, grandes empresas. El 94% de las 620.000 unidades económicas que hoy están facturando electrónicamente son Pyme, no sujetas de crédito con tanta facilidad. Además, me pregunto, qué sucede si le agregamos el periodo de recuperación económica que está por comenzar, producto de la vacunación, donde tendremos una nueva dinámica renovadora, que se requiere para recuperar el tejido social perdido por la pandemia.
El próximo primero de agosto inicia en operación el Radian, el Registro Administrado por la Dian, que garantizará la “Unicidad” de las facturas electrónicas como Título Valor, que formará un nuevo ecosistema desarrollado en el Sistema de Factura Electrónica, que demostró con creces su fiabilidad. Las entidades financieras, las fintech, los proveedores tecnológicos han superado un piloto exitoso, que nos pone en un escenario real de arranque.
El Radian recibirá los eventos de la circulación de la factura electrónica, tales como los endosos electrónicos, figura jurídica que permitirá cambiar la titularidad de emisor al nuevo comprador de la factura electrónica, el cual dará la espera del pago del plazo de pago pactado en la factura, anticipando el pago al emisor con un descuento. Además, recibirá los eventos de pagos, avales, mandatos y limitaciones de tal forma que, además de otros mecanismos como, por ejemplo, que la simple consulta del QR de la representación gráfica de una factura permita consultar la trazabilidad mediante un certificado similar al conocido certificado de tradición y libertad.
Valoro la disposición de las empresas a recibir el impacto de una posible futura reforma tributaria. Sin embargo, las Pymes valorarían mucho más que las grandes empresas tuvieran la disposición real de convertir sus facturas electrónicas en título valor. Para ello, deberán enviar a la Dian y a las Pyme por cada factura, los eventos de acuse de la factura electrónica, de la recepción del bien y la aceptación.
Para lo anterior, deberán con sus proveedores de recepción, desarrollar la tecnología para hacerlo, sin vacilación, sin mezquindades. Estamos ante un hecho histórico de irrigar nuevos recursos a los pequeños empresarios en el momento que más lo necesitan. El envío de los mencionados tres eventos serán el verdadero aporte para las Pyme. Muy deseable que los financieros de las grandes empresas sepan presentar un buen proyecto de recepción, que además de permitir la automatización, tiene un efecto social sin precedentes.