El Foro Económico Mundial

Esta semana, para ser más precisos ente los días 16 a 23 de enero, se lleva a cabo el Foro Económico Mundial en Davos, Suiza. Un evento que resulta ser muy importante para el mundo y sobre el cual he decido dedicar esta columna para contar algo de historia que permita entender la relevancia en el contexto actual de esta organización y este foro, junto con un breve resumen de la visión de los riesgos que, a juicio de Foro Económico, el mundo enfrentará durante los próximos años.

Sea lo primero decir que este foro fue establecido en 1971 y ha sido una iniciativa que ha buscado durante años la mejora de la gobernanza del planeta y la creación de mejores condiciones de vida, a partir del reconocimiento de los esfuerzos de alianzas público privadas, la academia y la sociedad civil. A partir de la premisa según la cual “[…]el progreso ocurre al reunir a personas de todos los ámbitos de la vida que tienen el impulso y la influencia para hacer un cambio positivo”, cada versión de la reunión del Foro Económico Mundial representa oportunidades y desafíos muy importantes para motivar cambios.

Hoy y luego de sus más de 50 años de existencia, el Foro Económico Mundial no solamente tiene presencia a través de sus centros de investigación en Nueva York, Pekín, Tokio y Silicon Valley, en Estados Unidos, sino que permite entender muchos problemas económicos desde una perspectiva holística que incluye una visión política, así como económica, social, tecnológica e incluso ecológica, tal como Klaus Schwab, lo reconoce.

No por azar en 2016 el profesor Schwab fue pionero en anunciar y reconocer que los 7.400 millones de personas de ese entonces en el planeta (hoy más de 8.000 millones) nos aproximábamos hacia una revolución que sería sin duda comparable con la máquina a vapor, la electricidad o la era de los computadores. Un momento en donde la creciente velocidad de apropiación tecnológica, sin precedentes, empezaba a marcar el factor diferenciador del cambio de era: inteligencia artificial y sus algoritmos, impresiones en 3D e importantes desarrollos en robótica eran en ese entonces los puntos focales que mostraban un notorio desarrollo.

Hoy, en pleno 2023, el Foro Económico Mundial no solamente le muestra a la humanidad la posibilidad de tener una plataforma de interacción en el que se permite la interacción entre CEO de empresas multinacionales con líderes políticos del planeta y cabezas de organizaciones que representan la sociedad civil, en una organización sin ánimo de lucro, sino que abre la posibilidad de compilar valiosa información para el diseño e implementación de política pública y para la creación de escenarios de lo que hay por enfrentar en el planeta.

Justamente en este último punto, y a efectos de la preparación de la actual versión del Foro, Saadia Zahidi, directora administrativa del FEM y su equipo presentó un reporte más que interesante sobre los riesgos globales para 2023. En su informe, llama poderosamente la atención la diversidad de retos que, según el foro, son los puntos más importantes que debe enfrentar en el corto y largo plazo la humanidad.

Para una encuesta realizada entre septiembre y octubre de 2022, con cerca de 1,200 opiniones de expertos, desde la academia, el sector empresarial y el gobierno se describe el top 10 de los principales riesgos sobre los cuales deberá presentarse la mayor atención en los próximos años. En un análisis de los siguientes dos años aspectos como el costo de vida, los desastres naturales, las confrontaciones geoeconómicas, la imposibilidad de mitigar el cambio climático, la erosión de la cohesión social y la polarización terminan siendo los cinco aspectos más importantes a considerar.

Desde una visión de la próxima década en el mismo ejercicio se resalta nuevamente la imposibilidad de mitigar el cambio climático y con ello las dificultades que de ello deriva la adaptación del estilo de vida frente a esos cambios, los desastres naturales y el clima extremo, la pérdida de biodiversidad y la migración involuntaria a gran escala de comunidades en diferentes continentes.

Si bien los 5 riesgos más relevantes identificados en el corto plazo corresponden a una combinación de riesgos sociales, ambientales y geopolíticos, el 80% del top 5 de los riesgos identificados de largo plazo para la próxima década corresponden a aspectos del ambiente. Por ello temas relacionados con transición energética, la crisis climática, pero también aspectos relacionados con el peligro de la desinformación e infraestructuras para una economía basada en energías limpias resultan ser algunos de los temas tratados en este importante evento. Qué bueno que en Colombia tomemos atenta nota de las lecciones aprendidas en el foro y las tengamos como puntos de inspiración de nuestra cotidianidad.