El turismo oscuro

No son pocos los turistas que llegan a diario a Medellín, Cartagena y otras ciudades buscando un turismo distinto, dotado en algunos casos de historias truculentas y no pocas de historias ilegales. Este turismo oscuro es una realidad y vale la pena ponerle atención.

En Medellín llegan según la alcaldía cerca de 700.000 personas cada año y uno de sus atractivos son las visitas a los sitios donde estuvo Pablo Escobar, el morbo que genera conocer su historia alimentada por las tantas series atrae mucha gente y este turismo está siendo aprovechado por unos pocos. También es una realidad que en esta ciudad y Cartagena son recurrentes los planes de despedidas de solteros y la explotación que ello conlleva.

¿Es válida la promoción del turismo oscuro? Depende del plan, fue noticia la demolición del edificio Mónaco, en Medellín no pocos lo vieron como una oportunidad desaprovechada en la que muchos viajeros llegaban para visitar el edifico habitado por Pablo Escobar, no se trata de montarle un altar a tan siniestro personaje, sino de darle la vuelta al mensaje, los miles de turistas que atraía este turismo oscuro podían ser aprovechados para finalizar con un mensaje positivo; por ejemplo una charla del peligro sobre el consumo de las drogas y una buena sensibilización de la guerra que sufrió el país.

El experto en innovación de modelos de negocio, Christian Restrepo opina que esta realidad es una oportunidad económica y de resignificación de los espacios y las historias negativas; de lo malo también se puede aprender y se puede aprovechar económicamente además de dar un nuevo mensaje positivo.

Por otro lado, el turismo sexual no puede ser un objetivo, el turismo oscuro debe tener límites y la explotación de mujeres, extranjeros y hasta menores de edad se debe combatir, no se pude ser complaciente con el delito, hacerse el de la vista gorda solo acrecienta los problemas, el turismo es también una imagen, por lo tanto, debe saberse manejar.

Estados Unidos es un experto en la materia, sus figuras negativas tienen todo un modelo, Alcapone en Chicago tiene un museo que le produce miles de dólares de ingresos a la ciudad, su espacio muestra la vida del personaje y con ella sus horrores. Así, al final deja en los curiosos turistas un contundente mensaje sobre la vida del criminal. De manera similar ocurre con Salem, el horror de la quema de varias mujeres fruto del fanatismo protestante de la época, volcó a la ciudad entera en un atractivo turístico en donde se aprovecha el trágico hecho para montar todo un escenario en donde se encuentra un museo, locales comerciales y hasta lectura de cartas. Todo con el fin de atraer turistas y aprovechar este turismo oscuro, dejando también un mensaje contundente sobre la locura del hecho.
El turismo oscuro es una realidad del país, y es un llamado a la falta de misticismo en el mercado colombiano, las distintas ciudades tienen un sinnúmero de historias que contar las cuales están esperando para ser aprovechadas.