Sistema Desintegrado de Transporte

En el caso del Sistema Integrado de Transporte de Bogotá, el alcalde Gustavo Petro empieza a enfrentar realidades que no quiere ver. Una de las grandes incógnitas que tenía la administración era si iba a modificar las tarifas a los usuarios. "Va a haber un decreto tarifario en los meses de junio y julio. En junio será solo para Transmilenio y en julio para el conjunto de la ciudad. Serán las primeras tarifas del Sitp", dijo el mandatario hace días. Un usuario debería pagar lo mismo por ingresar a un bus del Sitp que a un articulado de Transmilenio y un aumento de tarifa hubiera generado un rechazo popular incontrolable.

Se sabe que bajarán la tarifa 200 pesos en horas valle, pero los operadores del Sitp han dicho privadamente que demandarían el valor diferencial frente a su modelo económico original, ya que golpea las famosas rentabilidades de los próximos 24 años. Una demanda en tribunales, de entrada le auguraría un complicado futuro a la ciudad. 

El caso del concesionario "Coobus" viene siendo denunciado por otros concesionarios del sistema y es grave. No han podido demostrar su capacidad financiera y tampoco tienen lista su flota de buses. Al revisar su página web, ahora convocan a los propietarios de buses a que vayan a la Notaria 61 a firmar el Acta de Constitución de una nueva sociedad de propietarios de Coobus, que pretenden fusionar con la sociedad actual, la que ganó la licitación para operar una de las zonas. Abogados expertos en contratación pública dicen que esto es ilegal ya que cambia las condiciones financieras y jurídicas y expone al Sitp a una posible demanda.

El nuevo gerente del Sitp tiene el "chicharrón" en su escritorio ya que caducar el contrato, que es una de las opciones, es igual de dañino para el sistema como dejarlo que siga incumpliendo. Al ser integrado, todo el sistema va a arrancar atrasado por culpa de un operador. La realidad es que todos los buses de todos los concesionarios no estarán antes de dos meses.

Como si lo anterior fuera poco, se oyen inconsistencias entre el gerente de Transmilenio, Fernando Rey, y el alcalde Petro con respecto al inicio, pues el cuello de botella del sistema en este momento es el recaudo. Rey dijo esta semana que si las circunstancias no se daban técnicamente para subsanar las dificultades, buscará un plazo adicional para iniciar operaciones. Rey prefiere esperar antes que salir a improvisar. Literalmente dijo que el tema lo tenía "cabezón" dado que hay cuatro posibles sistemas para operar y debe elegir uno de ellos para iniciar la Fase III que únicamente funcionaría entre Fontibón y Engativá para luego irse expandiendo gradualmente durante los próximos 18 meses.

El Alcalde, por su lado, insiste en inaugurar el 9 de junio, y algunos colaboradores cercanos ya recuerdan la famosa "inauguración" de la 26 de la alcaldesa Clara López el año pasado, con la mitad de la obra por terminar. Petro quiere cortar la cinta en algún lugar para no incumplir promesas de campaña, pero su terquedad lo hace ver una realidad que sólo está en su imaginación. Faltan paraderos, recaudo, no hay señalización y a la fecha la gente no sabe si la tarjeta actual de Transmilenio servirá para subirse a los nuevos buses o si tendrán que cambiarla por otra. En dos semanas es imposible definir todos los detalles que hacen falta. Del afán no queda sino el cansancio, y en este caso no sólo del mandatario. Finalmente, llegó un problema que Petro no va a poder resolver vía Twitter.

Ñapa: Sorprende descubrir que tres funcionarios de alto nivel en el Invima tendrían un supuesto  padrinazgo político por parte de tres miembros de la Comisión Séptima de la Cámara. La directora Blanca Elvira Cajigas (muy cercana al representante Rafael Romero de Boyacá), Francisco González, subdirector de Medicamentos (cercano al representante Holger Díaz, de Santander) y el ex concejal de Barranquilla Harry Silva, nuevo Subdirector de Alimentos y Bebidas (cercano al Senador Efraín Cepeda y al representante Armando Zabarain, ambos del Atlántico).    Ojalá sean casualidad las amistades con estos políticos que curiosamente legislan desde la Comisión Séptima sobre temas de salud.