Nuevas habilididades para el futuro

Un líder empresarial debe poseer  habilidades  transdisciplinarias y la capacidad de construir equipos colaborativos eficaces con competencias complementarias y con enfoques de multiples usuarios que promueva “knowledge sharing”, los procesos propios de compartir conocimiento. Es crucial impulsar la versatilidad, la adaptabilidad y la creatividad en la construcción y desarrollo de soluciones y nuevas estrategias en particular en las posiciones de liderazo y gerencia en todos los sectores productivos e industriales.

Al estar las personas, las organizaciones y los países cada vez más interconectados, es necesario que se profundice en aquellos conceptos nucleares que nos permiten entender el mundo a nuestro alrededor desde las ciencias naturales hasta la historia, el lenguaje, la economía, el comercio, entre otros. Pero aún más allá es llegar a una verdadera  aplicación de todo esto a nuestras vidas, comunidades y profesiones.  De manera que se pueda ampliar la visión de mundo a estar realmente comprometidos globalmente. 

El respeto por las distintas culturas y la diversidad acompañado de un desempeño ético intachable son críticos. A nivel de las universidades esto nos pone a pensar en nuestros modelos de internacionalización del currículo y los resultados de aprendizaje esperados desde la perspectiva de la internacionalización. No solamente requiere del profundo conocimiento del estado de arte de cada disciplina sino más aportes para avanzar los paradigmas de conocimiento global.

Aún cuando a nivel mundial la adopción e impulso a la tecnología varía de manera significativa, es claro que cada vez permea más nuestras vidas. El conocimiento profundo de la tecnología se torna necesario en el quehacer diario. Tener capacidades significativas en análisis basados en datos para todas las profesiones es indispensable.  Se vuelve distintivo el tener la habilidad de discernir, correlación y sintetizar entre tanta información disponible, lo que constituye la construcción de conocimiento a través de información. La incorporación de inteligencia artificial y la nanotecnología a nuestra vida diaria irá incrementando, produciendo más resultados y más capacidades pero a la vez demandando más habilidades. De tal manera, que la adquisición de destrezas en codificación o la capacidad de interactuar con máquinas inteligentes  puede verse hoy en día similar a lo que hace un tiempo era aprender un segundo idioma; son nuevos lenguajes y nos vemos abocados a ser más que proficientes en ellos. En otras palabras, no es ser simplemente usuarios de la tecnología, ni tener suficiente exposición a ella sino la construcción de nuevas habilidades tecnológicas. Esto implica que adicionalmente a las fortalezas disciplinares que se debe tener en cada área de conocimiento según la disciplina, es deseable la adquisición más integral de conocimientos y habilidades.

Similarmente, concientizar y desarrollar  nuevas destrezas para favorecer el desarrollo sostenible son indispensables en el mundo contemporáneo. La concientización a nivel de estudiantes en formación en disciplinas empresariales (administrativas, de gestión o de emprendimiento) no debe limitarse a una mirada rápida a tópicos asociados a la sustentabilidad. Incrementar la concientización y a su vez desarrollar las habilidades y competencias asociadas a la sustentabilidad se vuelve necesario. Este tipo de habilidades pueden ser orientadas por ejemplo a la participación en practices ambientalmente sostenibles, implementar y monitorear nuevas estrategias ambientalmente sostenibles, desarrollar políticas y procedimientos para el desarrollo sostenible, entre otros.

Las perspectivas sistémicas y rigurosas apoyadas en datos bien analizados, incorporando los aportes de diversas tecnologías son los ingredientes para desarrollar estrategias sostenibles en las distintas actividades productivas.

Las Universidades debemos ser capaces de transformar ágilmente nuestros currículos y contribuir a la identificación de los resultados esperados de aprendizaje y formación para las necesidades futuras.

Finalmente, si podemos realmente construir las bases para garantizar la capacidad de aprendizaje continúo y real gusto por hacerlo habremos avanzado.