En el marco de un programa conocido como gestión de la demanda, la compañía logró reducir 16,5% el consumo de energía en dos años.
El plan tiene como objetivo reducir la cantidad de electricidad que se demanda durante las horas pico en sus plantas de Yumbo (Valle del Cauca) y Tuta (Boyacá). Pero no lo ha hecho sola, pues el plan ha tenido el acompañamiento de una de las grandes del sector: Isagen.
La compañía energética ha sido la encargada de monitorear, por las 24 horas del día, el consumo energético en dichas plantas.
“La producción de acero se caracteriza por una operación continua y es por esto que para nosotros liderar este programa es solo una de las tantas formas en las que contribuimos al entorno en el que estamos presentes. La eficiencia energética la logramos por medio de una sistematización de nuestros procesos que nos permite impulsar mejoras productivas y beneficios al medio ambiente”, aseguró Raúl Blum, gerente de la planta ubicada en Yumbo.
La compañía informó que con estos proyectos le está apostando a la reducción de emisiones de CO2.
Al respecto, Israel Medrano, gerente de ingeniería y energía de Gerdau Diaco, rescató el papel que Isagen ha tenido en el desarrollo de proyecto. “La alianza con una empresa como Isagen se traduce en nuestro compromiso con el medio ambiente y nuestra apuesta por la eficiencia energética”.
