Una de las entidades sin ánimo de lucro que están dentro del círculo del sistema financiero es la Corporación Microcrédito Aval, enfocada en la población de más bajos ingresos, especialmente las personas de estratos uno y dos.
Según reportó la organización, “a la fecha hemos apoyado a 47.453 microempresarios por más de $65.100 millones, ofreciéndoles oportunidades de crédito orientadas a la financiación de actividades productivas a microempresarios que normalmente no tienen acceso a fuentes eficientes y formales de financiamiento”, dijo Diego Duarte, director Ejecutivo.
Pero, además de reportar estas cifras generales, con motivo del mes de la mujer, presentaron un balance del porcentaje de pequeñas empresarias y emprendedoras que han accedido a las oportunidades de crédito. Allí encontraron que hoy en día equivalen a 65% de las beneficiarias.
“A lo largo de los años, ellas han encontrado en los microcréditos la posibilidad de generar ingresos y potenciar las oportunidades económicas para sus familias y comunidad. Son ellas quienes han tomado la decisión de empoderarse para ir orgánicamente a solicitar el crédito por sus negocios”, explicó el informe.
Por su parte, el director de la entidad agregó que “la mayoría de estos emprendimientos empiezan en sus hogares y les ofrecen la oportunidad de independencia económica, empoderamiento y manejo del tiempo (para compartir con sus familias). Este grupo poblacional, tiene mejores hábitos de pagos, y presentan mejores métodos de cancelación del crédito”.
Como complemento a la interacción con las personas que requieren estos servicios, el programa se ha enfocado en ofrecer trabajos de educación financiera, pues uno de los objetivos de la Corporación Microcrédito Aval, es que en los estratos más bajos se comprendan términos básicos a las finanzas, los sistemas bancarios y cómo evitar caer en problemas o fraudes con estafadores y gota a gota.
