El proyecto, ubicado sobre el valle del Río Teusacá en el municipio de La Calera, hará compostaje con los residuos orgánicos. Los elementos restantes también tendrán su finalidad, pues con estos se harán insumos reciclables para vender a la industria.
“Al no generar basura evitamos que nuestros desechos terminen en Mondoñedo con todos sus efectos de contaminación y huella ambiental que implica desplazar un camión desde La Calera hasta ese botadero”, agregó Maldonado.
La compañía informó a través de un comunicado que también tendrá una planta de potabilización de aguas lluvias “que no solo suministrará el agua necesaria para las 115 casas de Bosques de Granada y Cayundá sino que también dispondrá de reservas hídricas que podrán ser utilizadas por el municipio”.
Con esta iniciativa, el proyecto quiere aprovechar las precipitaciones de la zona, pues según el director de Entorno 2000, en el lugar “llueven 1,6 millones de metros cúbicos, 40 veces más de lo que consume la urbanización, que es 40.000 metros cúbicos de agua”.
En cuanto al manejo de aguas negras, Maldonado garantizó que no se realizarán vertimientos al alcantarillado ni a las quebradas. Para garantizar esto, “cada lote tiene un digestor en donde las aguas negras son transformadas en gases por bacterias. El agua sin sólidos es conducida a un humedal y luego a una laguna de oxidación. Posteriormente es llevada por una red paralela y podrá ser usada para regar los bosques que rodean los 115 lotes de la urbanización”, informó la compañía en un comunicado.
Además, para cuidar la naturaleza de la zona, la empresa decidió entregar al municipio 13 hectáreas para conservar el bosque nativo del lugar.
