Ojo que nos estamos quedando atrás, por la lentitud en la toma de decisiones, construcción de las megaobras de infraestructura y en mejores relaciones comerciales con socios estratégicos como China, especialmente ahora con el anuncio de un tratado comercial entre Estados Unidos y La Unión Europea.
Además de ser significativa la muerte del presidente venezolano Hugo Chávez, en cuanto al manejo de las relaciones comerciales de Estados Unidos y sus socios de América Latina, en las actuales circunstancias económicas todo podría cambiar.
Recientemente fueron suscritos nueve acuerdos comerciales con China, mientras el acuerdo con la Unión Europea sigue pendiente después que el acuerdo con Estados Unidos pasó años en discusión de arandelas hasta que se firmó.
Pero si, ¿Estados Unidos y la UE se unen, es decir si entre ricos y poderosos hay acuerdos preferenciales, a dónde iría Colombia y en general los socios económicos de esas potencias que tratan de subsistir en el tercer mundo?
Esa pregunta tiene de todo como en botica. Sobre todo porque esa unión tiene en el fondo la competencia con China, una economía que ahora reportó un crecimiento del 7,5%, después de haber superado el 10%.
Un acuerdo entre Estados Unidos y la Unión Europea, potencias económicas que se han visto arrastradas por la crisis financiera global y con serios problemas de empleo, ¿dejaría en veremos a nuestros países de América Latina? Es la pregunta que nos hacemos.
Quizás las relaciones de la Unión Europea y Estados Unidos con América Latina en nada se afecten con la desaparición de Chávez, pero nunca se sabe qué pasaría cuando la economía es la preocupación central.
Según la Organización Mundial del Comercio, OMC, el año pasado, la Unión Europea mostró un balance equilibrado y exportó más de US$2,1 billones con importaciones de US$2,3 billones, en tanto que Estados Unidos vendió fuera de sus fronteras US$1,4 billones y compró US$2,2 billones.
No creemos que nuestros empresarios estén pensando en competir en industria. Especialmente porque hay quienes dicen que hay gremios que ahora son asociación de importadores, no de productores.
Otro riesgo que se avecina para nosotros es que en esa alineación para supervivir, la UE y EE.UU. acuerden competir con China, un cliente interesante para Colombia y el mundo, pues está comprobado que cualquier indicador que afecta al gigante asiático, repercutirá negativamente en sus socios comerciales en desarrollo.
Para Colombia producir sería lo ideal para estar en medio del negocio entre EE.UU. y la UE, pero quién se atreve con esta infraestructura tan pobre, que no garantiza poder llegar hasta los puertos de manera competitiva, porque esos costos son aplicados a los productos.
Habrá que ver cómo Colombia puede tener dos socios poderosos y fuertes como Estados Unidos y la Unión Europea; socios para su propio bien, pero que en un caso dado no contemplarían a Colombia como un tercero favorable, porque allá las cosas pintan mal en lo económico.
Si China decide aprovechar nuestros nexos comerciales y envía para su terminación los casi 200 productos que podría comerciar en Estados Unidos y la Unión Europea desde Colombia, es posible que ganemos algo. Porque podemos exportar manufacturas hasta con el 34% de origen local, aunque el resto sea producción China.
Así pasaríamos de vender bananos, café y frutos en la Unión Europea, productos sin valor agregado, a enviar a Estados Unidos confecciones, calzado, manufacturas plásticas, artículos de cuero y hasta autopartes, que China enviaría para su terminación en Colombia y posterior venta en esos poderosos mercados.
Habría que ver si los colosos ricos de la economía mundial quieren seguir el juego o sencillamente se cierran para hacerse fuertes entre ellos. Y ahora esperemos qué pasa con los cambios en Venezuela, todo puede cambiar, para bien o para mal.