Así es la tendencia de acudir a cámaras de flotación para que pueda reducir el estrés

Si alguna vez ha deseado flotar en el agua ya no tendrá que esperar a ir al Mar Muerto, sino que lo podrá hacer en lo que las tendencias llaman “centros de flotación o de gravedad”.

“Resulta difícil saber cuánto tiempo ha pasado pero los músculos parecen haberse relajado hasta tal punto que apenas puedes sentirlos. Los pensamientos también se evadieron, el cuerpo está flotando en la oscuridad y en el silencio”, dicen varios testimonios de personas que han vivido la experiencia.

Estas cámaras de flotación vienen existiendo desde la década de los 50, y ahora, esta práctica es considerada toda una terapia de bienestar para la mente, el cuerpo y las emociones.

Pero, ¿cómo funcionan?. Lo primero es que los tanques de flotación están llenos de sales de epsom disueltas en agua, mucho más densas que ir a la playa, por lo que se puede flotar con mayor facilidad. Una vez adentro en las cápsulas, las personas entran en una profunda relajación y desconexión del mundo exterior.

Incluso, desde hace varios años se ha venido creando en diferentes países clínicas con estos servicios que funcionan como “terapias de estimulación ambiental restringida”, para reducir el estrés y la ansiedad, y para tratar trastornos de estrés pos traumático.

En EE.UU. hay ya más de 400 cámaras de flotación. En 2016, Reino Unido contaba con 30 clínicas.

En Colombia también existe una pero relacionada para el ocio. Allí acuden personas de toda índole. “Viene gente que sufren de estrés y fatiga mental. También líderes empresariales que buscan innovación y solución de problemas con esta práctica” explicó Rafael Saavedra, director de Gravedad Cero.

Esto ha sido un boom a tal punto que, se volvió una tendencia de lujo en millonarios de EE.UU., que cuentan con cámaras de flotación privadas.

Qué sensaciones y experiencias genera esto

El agua está a la temperatura exacta de la piel, posibilitando la pérdida de toda sensación exterior. La ligereza se combina con el silencio, la oscuridad y la percepción de que se es uno solo con el agua. Esta privación sensorial también puede provocar alucinaciones.

Qué dice la ciencia sobre ello

Una hora en una cámara de aislamiento sensorial podría equivaler a cuatro horas de sueño. Expertos en esta terapia dicen que esta prepara el cuerpo para la liberación de las “hormonas de la felicidad”. Otros estudios sugieren que dicha relajación mental lleva a la sugestión y sirve de apoyo para dejar de fumar, perder peso y aumentar la creatividad.

Beneficios para la salud

Los tanques de aislamiento sensorial son utilizados para dar una respuesta inmediata a los niveles de estrés. Así mismo, la ciencia ha dicho que funcionan para aliviar dolores musculares y a la desinflamación de articulaciones. Se dice que ingresar a estas cámaras de flotación es como meditar, lo que ayuda a estimular el sistema inmunitario.

En el país ya hay un centro de gravedad

Se trata de la empresa Gravedad Cero ubicada en Bogotá. Allí los tanques de flotación están llenos de 400 kg de sales de epsom. Las personas entran desnudas a la cápsula que se encuentran en un lugar privado durante una hora. Al finalizar, se puede dirigir a un espacio para meditar o reincorporarse. La sesión cuesta en promedio $97.000.

Qué dice la ciencia sobre ello

Una hora en una cámara de aislamiento sensorial podría equivaler a cuatro horas de sueño. Expertos en esta terapia dicen que esta prepara el cuerpo para la liberación de las “hormonas de la felicidad”. Otros estudios sugieren que dicha relajación mental lleva a la sugestión y sirve de apoyo para dejar de fumar, perder peso y aumentar la creatividad.

¿Es una tendencia de millonarios?

Ante el boom de esto, empresas le han apostado en crear tanques de flotación en forma de huevo para tener en casa. La instalación necesita tomacorriente, una entrada de agua y aliviadero. Algunos ya traen sistema de sonido para poner música, la cual luego se apaga para garantizar la desconexión. Cada uno podría costar más de US$30.000.