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Panorama del consumo anual per cápita de vino
El consumo de vino por persona en Colombia el año pasado alcanzó 0,66 litros, ubicando al país en el puesto 12 de los hispanohablantes que más consumen la bebida
Para una tarde de amigos, una cena, una ocasión especial, o incluso después de una larga jornada laboral, un buen vino siempre es una gran opción para los que aman esta bebida. Sin embargo, es un gusto que no despega aún, pues, según datos de la Organización para la Alimentación y la Agricultura, FAO, y la Organización Internacional de la Viña y el Vino, OIV, en los últimos 10 años, el consumo anual per cápita de vino en Colombia aumentó apenas 0,16 litros.
Lo anterior, pues en Colombia se pasó de consumir 0,44 litros de vino en 2014 por persona, a 0,60 litros en 2024, lo que llevó al país a ascender, en una década, del puesto 15 al 12 dentro de los países hispanohablantes que más consumen vino.
Laura Hernández, sommelier de Leo y La Sala de Laura, aseguró que dentro de las falencias existentes para que Colombia sea aún más fuerte en el consumo de vino está la falta de cotidianidad en el producto. “Todavía hay una percepción de que el vino es complicado o que es solo para “entendidos”. Para que se consuma más, hay que seguir derribando esa idea y mostrar que el vino también puede ser cotidiano, cercano, sin tantas reglas”, explicó.
Además, señaló que hace falta más acceso, ya que en muchas ciudades pequeñas o pueblos, la oferta sigue siendo muy limitada.
Juan Guillermo Rodríguez, gerente general de Arrogante, señaló que entre los desafíos del consumo de este licor están la formación y cultura vinícola, los impuestos y la producción.
“Falta que más colombianos entiendan el vino como algo cotidiano, no solo para ocasiones especiales. Hay un desconocimiento general sobre tipos, maridajes y conservación”, dijo. Además, Rodríguez explicó que el vino importado paga impuestos altos, lo que encarece el producto. “Una reforma que incentive los vinos podría masificar su consumo”.
Además, dijo que Colombia no tiene una tradición productora fuerte, y aunque hay proyectos en Boyacá y Nariño, falta inversión y promoción. Sin embargo, no descartó que el terreno no es apropiado.
Según los expertos, las catas, cursos y ferias, son oportunidades fundamentales para que el consumo de vino sea cada vez mayor en Colombia.
“Cuando la gente prueba, aprende y entiende, se anima a comprar más, a explorar y a compartir. Las catas, los cursos, incluso un buen asesoramiento en una tienda, hacen toda la diferencia. No es solo enseñar de vinos, es enseñar a disfrutar, a descubrir lo que a cada quien le gusta. Esa cercanía genera confianza y más consumo a largo plazo”, dijo Hernández.
En línea con esto, Rodríguez señaló que este tipo de espacios son claves, ya que rompen mitos y crean vínculos. “Una cata bien llevada genera una conexión sensorial que impulsa la recompra”, dijo.
Además, explicó que este tipo de eventos fomentan la fidelización por estilo o marca, ya que ayudan al consumidor a identificar lo que le gusta y a ser más consciente al elegir. También, forman embajadores espontáneos, pues “cada persona educada en una feria o cata es alguien que recomendará vino a sus amigos y familia”, añadió el experto.
Con el fin de incentivar el consumo y la cultura del vino, en ciudades como Bogotá, Medellín, Cali y Barranquilla, ya hay escuelas, eventos y ferias consolidadas en este segmento. Esto ha llevado a que cierta parte de la sociedad use el vino no solo para ocasiones especiales, sino también como parte de su día a día. “Hay una mayor oferta, con precios y estilos para todos los gustos; la gente está más abierta a probar cosas nuevas; y además, eventos como Expovinos o las ferias que se hacen en ciudades como Bogotá y Medellín han ayudado a que el vino se entienda más y se vea menos como algo elegante o lejano”, explicó Hernández.
Si se analiza el ranking de 2024, los países hispanohablantes que se llevan el podio como los de mayor consumo de vino por persona son España con 23,80 litros, Argentina con 21,60 litros y Uruguay con 14,30 litros.
A ellos, en el top 10, les sigue Chile con 11,60 litros, Paraguay con 5,20 litros, Perú con 3,60 litros, Brasil con 1,90 litros, México con 1,50 litros, República Dominicana con 1,40 litros y Bolivia con 1 litro.
De ahí para abajo, el top 15 lo completan Ecuador, Colombia, El Salvador, Honduras y Panamá, todos con un consumo per cápita anual que no llega ni siquiera al litro.
Se convirtió en el más joven en jugar un partido oficial con Argentina, con 17 años, al disputar el encuentro de clasificación para el Mundial