El Centro de Bogotá agrupa 9% de las librerías de Colombia

Los miles de estudiantes universitarios y ejecutivos que viajan al centro para trabajar cada día hacen que este sector tenga un caldo de cultivo que permite que se consigan libros desde $2.000 hasta incunables que pueden costar millones de pesos. 

En todo el país hay 604 librerías afiliadas a la Cámara Colombiana del Libro, de las cuales 369 se encuentran en Bogotá, esto es 61% del total, es decir, que más de la mitad se concentra en la capital del país. Tan solo en el área que conforman La Candelaria y Santa Fe funcionan 55 de esas más de 300 librerías, lo que representa 15%. Y si ampliamos el panorama, estos 55 locales son 9,2% del total de las librerías que hay en el territorio colombiano.

Esto, sin contar dos de las bibliotecas más grandes de la capital: la Nacional y la Luis Ángel Arango, que cuentan con 2,98 millones y 1,5 millones de libros, respectivamente.

Por ello, si tuviéramos que pensar en un lugar donde se concentra la mayor cantidad de libros a nivel nacional, sería el centro de Bogotá. Además de estas dos bibliotecas, la Librería Lerner, el Siglo del Hombre Editores, las universidades de Los Andes, Rosario, Externado, el Fondo de Cultura Económico, los locales en el pasaje de la Iglesia de San Francisco y los vendedores informales se encargan de que este lugar tenga entre las más altas concentraciones de libros en el país.

La razón de ello no es solo la diversidad de público que visita este tipo de locales, sino también la cantidad de compras que se hacen, una actividad que a nivel general viene creciendo, pues el total de ejemplares vendidos en Colombia durante 2015 ascendió a 39,2 millones, 3,5% más que en 2014. Este porcentaje es aún mayor cuanto se observa  la facturación, pues las ventas sumaron $658.458 millones, 6,5% más frente a 2014.   

“Entre semana, tenemos un público concentrado en estudiantes y profesores, dado que está en una zona rodeada de profesores. Y el fin de semana tenemos un público más variado, son turistas y familias que acuden a talleres y actividades que ofrece el centro cultural”, señaló Álvaro Velarca, director del FCE.

El vocero agregó que la librería atiende a un promedio de 350 visitantes por día y aproximadamente 7 de cada 10 de ellos se llevan uno o varios libros. Eso le permitió a la empresa vender 93.000 ejemplares en 2015, lo que representa aproximadamente un promedio de 7.750 ejemplares por mes.

Y ese perfil del comprador se repite de librería a librería. Por ejemplo, en el caso de El Siglo del Hombre, los principales clientes son académicos. “Estamos rodeados de las universidades más importantes de Colombia, ellos son nuestros principales compradores, entre estudiantes y profesores. En segunda instancia, es un barrio turístico, entonces llegan muchos extranjeros y mucha gente de otras ciudades”, dijo Víctor Hugo Bernal, administrador de la librería. Estos visitantes compran mensualmente un promedio de 500 a 600 libros, principalmente de derecho.

En el caso de la Librería Lerner, que cumplió 60 años de fundación en 2016, las temáticas más demandadas son  “ciencias humanas: historia, literatura, filosofía, política, sociología, antropología. Literatura colombiana especialmente porque la distingue la sala Colombia y la literatura infantil y juvenil también se mueve mucho”, afirmó Alba Inés Arias, gerente de la firma.

La directiva agregó que estar en el centro de Bogotá le permite al local tener un dinamismo en visitantes y ventas: “en un mismo momento pueden estar entre 50 y 60 personas dentro de la librería mirando ejemplares en nuestros espacios. Es muy efectiva la venta, es muy poca la persona que entra y no sale con un libro (...) La cantidad de libros vendidos depende de la temporada, pero puede ser entre 270 y 350 libros diarios”.

La gerente agregó que una de las ventajas de ubicarse en el centro de la capital es que “la librería es una para todo el año, porque vendemos todo el tiempo y vendemos de todo. Nuestras ventas no dependen de que salga un libro best-seller”.

Los actores informales

Sin embargo, estos no son los únicos actores que permiten que Bogotá tenga de las más altas concentraciones de libros del país. Hay personajes como Hugo Ruiz, un librero que desde hace 20 años tiene un puesto ambulante en el centro de la capital. Lo peculiar de este personaje no solo es su memoria, pues puede retener los números de celular de sus clientes; ni tampoco sus gustos, pues recuerda los tipos de libros preferidos por cada comprador; lo curioso, es la forma en que hace sus negocios.

“Voy a librerías, compro libros o muchos personajes me llaman para comprar bibliotecas, y compro 100, 200 o 500 libros. Me los dan a un precio económico y así yo también los vendo a un precio económico, más que todo a estudiantes”, explicó Ruiz.

Gracias a este tipo de tácticas, por las manos de este librero han pasado textos que no son muy fáciles de conseguir. “Los libros más caros que he vendido son pergaminos de 1.700, que son incunables. Por baratos, cuestan $800.000, el valor depende del contenido. Todos los libros son originales, y mi hobby son los antiguos porque tienen más historias. No hay como el libro antiguo, son muy buenos. Y por eso me conocen”, agregó.

Es este stock el que vende principalmente a estudiantes e historiadores, pues dice que son sus mayores clientes. Por eso, entre sus referencias están generalmente textos de historia sobre Colombia, arquitectura o antropología. Sin embargo, agrega que “los turistas me compran mucho de Gabriel García Márquez”.

Hugo Ruiz, o Don Hugo, como es conocido en el centro de la capital, ha ganado tal importancia entre los libreros de la zona que tiene compradores de la talla de Alberto Escobar, Carlos Medellín, Andrés Lafayette y hasta Rafael Pardo. De muchos de ellos tiene su número celular, que se aprende de memoria para contactarlos cuando tenga un texto que pueda interesarles. 

Y aunque su punto de venta se encuentra en la calle, esto no es excusa para que Ruiz tenga una especie de vitrina. “Todos los días cambio de libros para que las personas que pasan vean libros distintos y no tener solo un lote. Tengo unos 2.000 libros para mover y voy comprando y voy sacando. Hago un surtido variado y a raíz de eso puedo vender”.

Este librero, quien antes trabajó como taxista en la capital por un período de 30 años, aclaró que aunque es un vendedor informal, no comercializa libros piratas: “hay personajes que me llaman para comprar bibliotecas, yo miro cuáles son los que me sirven y gracias a eso vendo solo originales. Aquí vendo solo libros originales, el único pirata soy yo”.

Las opiniones

Álvaro Velarca
Director del FCE en Colombia
“Entre semana tenemos un público concentrado en estudiantes y profesores, dado que está en una zona rodeada de universidades. Y el fin de semana tenemos un público más variado”.

Ángela Mejía
Director sistemas de bibliotecas Universidad de los Andes
“En el sistema de bibliotecas de la Universidad de los Andes prestamos un promedio de 32.033 libros mensuales, préstamo externo. Los libros que estudiantes, profesores y empleados llevan a sus casas”.

Víctor Hugo Bernal
Administrador de la Librería Siglo del Hombre
“El perfil más importante es el académico. Estamos rodeados de las universidades más importantes de Colombia, ellos son nuestros principales compradores, entre estudiantes y profesores”.

Patricia Vélez
Directora de la biblioteca de la Universidad Externado
“Nuestros visitantes son estudiantes, profesores, investigadores de pregrado y posgrado, y es una biblioteca abierta a la comunidad. Aquí puede entrar cualquier persona sin restricción”.

Alba Inés Arias
Gerente de la Librería Lerner
“Esta librería lleva ya 60 años (...) Este es un punto importante dentro del centro de Bogotá, es un sitio turístico incluso, recibimos gente solo porque quieren conocer la Librería Lerner”.

Margarita Lisowska
Directora del Crai de la Universidad del Rosario
“Nuestro perfil de visitante físico es estudiante de pregrado en 88% y el resto son docentes, estudiantes de maestrías y doctorados. Pero cuando se observa el visitante virtual, esto es a la inversa”.

Roberto Téllez 
Jefe Servicios al Público Red de Bibliotecas Banrep
“El 70% de nuestros usuarios son personas que tienen una formación universitaria para arriba. Más o menos 60% es de los estratos 3 y 4. Y más de 65% son estudiantes o estudiantes-trabajadores”.

Lea mañana la segunda entrega del especial