Consejos para entender la producción y preparación del mejor café colombiano tipo exportación

Detrás de cada taza de café se cuenta la historia de las diferentes regiones del país en dónde este es cultivado. Algunas más frías, otras más cálidas, cada una aporta sus características y elementos definitivos a la hora de valorar una buena taza de café.

Colombia se ha destacado a lo largo de su historia por tener unas de las mejores plantaciones de café y cada taza de esta bebida consumida en el mundo es un pedazo del país, que al igual que el mismo producto, logra ser exportado mediante el aroma, el sabor y el color.

Según Liliana Palma, asesora experta de Carulla es Café, “el café siempre será una compañía y siempre va a estar presente en la mente y el corazón de todos los colombianos, por eso tienen que saber que tenemos el mejor café suave del mundo gracias al esfuerzo y disciplina de nuestros caficultores”.

Según la experta muy pocos conocen sobre café y el común de las personas ha tenido malas experiencias con la bebida, por esa misma razón no son capaces de ver la maravillosa maestría que hay detrás de cada taza. Así que para ella es muy importante, antes de querer mezclarlo, conocerlo y probarlo, saber que es lo que se está detrás de lo que se está tomando. Por eso la marca trae varias conferencias y charlas para hablar del valor de cada producto.

Por ejemplo, las personas podrán conocer, que valor agregado trae el café de origen, que son aquellos que obtienen las características propias de los lugares donde son cultivados; los Orgánicos, que son aquellos cultivados en zonas libres de agentes contaminantes y pesticidas, por lo que adoptan personalidades robustas y limpias; o también los Varietale, que son granos genéticamente puros, de gran tamaño y calidad.

En el mercado colombiano hay disponibles cafés para todos los gustos, y es que según la experta, el éxito en la compra del grano está en saber leer las etiquetas, para de esta manera poder estar seguros que la experiencia de consumo sea lo más cercana a nuestros gustos.

Con un proceso de producción, enmarcado por la mística y la ancestralidad, el café tarda casi tres años antes de dar su primera cosecha. Luego de esto es recogido manualmente por los caficultores y procesado para eliminar su pulpa y secado. Luego el café es curado para eliminar su cáscara y posteriormente catado. Finalmente, el grano es tostado y molido si se desea. De ahí en adelante cada quien podrá escoger cómo prefiere consumirlo. Según la experta la mejor opción es consumir el café en grano, molerlo en casa y de esa manera vivir la experiencia completa.

Al ser una bebida que combina con todo, Palma señala que una de las mejores combinaciones es la que se hace con chocolate, por esta razón recomienda el Mocaccino, que tiene café, leche, cacao en polvo y sirope de chocolate; también el Café Irlandés, que con una combinación de crema irlandesa, café, gotas de vainilla y crema de leche, promete endulzar los paladares. Otra recomendación es el expreso, con café helado y macchiato de caramelo. Todas estas combinaciones señaló que podrán aprender a hacer en las charlas.

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