“Colombia es un país donde se puede rodar cualquier película”, directora de ProImágenes

Esta es una de las tantas anécdotas que existen de los 22 proyectos que han sido beneficiados por la Ley 1556 de 2012 (Filmación Colombia), de los cuales 11 ya han tenido exhibición, mientras que seis se encuentran en posproducción y cinco más se encuentran recorriendo los principales festivales de cine del mundo.

Se trata de la ley que desde el 2013, cuando se reglamentó, ha permitido que importantes productoras cinematográficas desarrollen algunas de sus películas o series en Colombia y con talento colombiano.

En todo esto, Claudia Triana, directora de ProImágenes en Movimiento durante los últimos 18 años, ha tenido un papel destacado por su larga experiencia en el mundo del cine, y la transformación del mismo en Colombia, que pasó de realizar uno o dos largometrajes al año en la década de los noventa, a 36 el año pasado.

La Ley 1556 de 2012 o Ley Filmación Colombia ha generado ingresos por más de 86 mil millones de pesos, de los cuales 28 mil millones de pesos han sido invertidos por el Gobierno Nacional y Claudia Triana habla de los primeros resultados.

Rodando

¿Qué es lo más importante que se ha generado en estos años con esta Ley?

Lo más importante es que en los últimos 20 años se han generado una serie de estímulos y aportes para la cultura, que comenzó desde la creación del Ministerio de Cultura y las leyes que se han venido desarrollando paulatinamente y que cada una de ellas son un complemento.

Es un sistema donde está involucrada una política del Gobierno Nacional, con el Ministerio de Cultura y ahora el Ministerio de Comercio, con este tipo de exportación de servicios cinematográficos.

¿Cómo ha sido la respuesta de los productores internacionales?

Hemos recibido una respuesta positiva por parte de los productores internacionales que han quedado sorprendidos por el nivel profesional que tiene Colombia a la hora de hacer una película o una serie, incluso desde temas como extras hasta una serie de actores profesionales y bilingües para realizar roles importantes en sus producciones.

¿Un crecimiento del sector?

Han sido 15 largometrajes, un cortometraje de ficción y seis telefilmes. Estamos concentrados en este tipo de producciones, pero lo más importante que venimos logrando es la profesionalización del sector, cada vez más competitivos, que sin duda beneficiará directamente al cine nacional. Colombia es un país donde se puede rodar cualquier película.

¿Esperaban llegar a 22 producciones en tres años?

El incentivo de Puerto Rico nació en el 2005 y les tomó cinco años lograr la primera película y han llegado a tener diez películas en un año. Nosotros estamos muy orgullosos porque de los tres años con la Ley como herramienta, en los últimos dos hemos llegado a nueve producciones cada uno.

Trabajo en el exterior

¿Cómo es el trabajo de promoción internacional de esta Ley?

Un trabajo de promoción internacional de servicios de locaciones y producciones desde el 2007, pero que se ha intensificado con la aparición de la ley.

Hay momentos clave, como los festivales de cine, pero en Estados Unidos hay encuentros especializados en producción y locaciones a los cuales hemos asistido y nos ha generado muy buenos resultados, porque de las 22 producciones realizadas, diez son de productoras de Estados Unidos.

Lo más importante es generar la confianza de que lo que encuentran en la ley se lo vamos a cumplir. Muchos nos han manifestado malas experiencias de lugares donde las devoluciones son complicadas o que demoran hasta varios años. Nosotros, mientras cumplan todos los requisitos, se realiza muy rápidamente el dinero.

¿Qué papel ha jugado la imagen internacional que tiene Colombia a la hora de convocar a los productores?

Un país que tenía la percepción internacional muy difícil. En el 2007 nosotros, sin la ley, empezamos a promocionar el país como el lugar ideal como locación, pero la imagen poco o nada nos ayudaba. En los últimos años, con el cambio de la seguridad en el país y la inversión extranjera, junto a la ley, Colombia ha despertado el interés de la industria cinematográfica del mundo.

¿Qué dicen los productores colombianos sobre los resultados de esta ley?

Lo más interesante es escuchar como en tres años, productores colombianos que han trabajado en las producciones internacionales que se han beneficiado por la ley, hablan de un antes y un después de la ley, en cuanto al desarrollo y la competitividad a la hora de producir.

¿Qué dificultades han encontrado?

Lo que necesitamos es que les vaya bien, que tengan una experiencia exitosa para que vuelvan y para que le hablen bien a los demás, porque en este tipo de trabajo y de inversiones tan altas, lo más seguro es que si te fue bien, vas a volver, y si no has venido y piensas en hacerlo, consultarás primero con alguien que ya ha tenido esa experiencia.

Es un poco más difícil en las regiones donde no hay la infraestructura o todos los servicios profesionales como en Bogotá. De ahí que sea indispensable un acompañamiento del gobierno local.

Todo esto va asociado con la idea que promovemos de la creación del permiso único, que también está establecido en la ley, para evitar tanto trámite. En Bogotá, que es una ciudad difícil para esto, se ha logrado con una aplicación online que permite agilizarlo todo.

¿Y en las regiones?

Nos ha tocado un fuerte trabajo con las autoridades que no estaban acostumbradas al cierre de calles y demás. Antes, para una película o telenovela colombiana, se solicitaba el cierre por unas horas de unas calles y a su alrededor un par de camiones. Hoy, para una serie como ‘Narcos’, se requieren algunos cierres y permiso para parquear diez o más camiones, y eso es una dificultad.

Trabajar con la Dian para que entiendan la importación de grandes cantidades de ropa que será vestuario y que volverá a salir, que no se quedará en Colombia y lo venderán ilegalmente.

Mucho aprendizaje con los alcaldes, la aeronáutica civil y otras entidades. Que todos entendamos que esto genera unas consecuencias positivas para el país.