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“Las reservas de petróleo, que es la principal fuente de divisas, se están agotando. Si Colombia quiere urgentemente reemplazar esa generación de divisas por otra actividad, debe dedicarse a exportar manufacturas”, señala el consultor en comercio internacional, Martín Augusto Ibarra. Incluso el experto indica que las estadísticas muestran que un 74% del comercio externo mundial es manufactura, mientras en Colombia un 66% está dado en petróleo y carbón.
“Debemos ir paulatinamente a tener una estrategia de comercio externo como la del mundo y para ello se necesita atraer inversión en manufactura y ahí las zonas francas son fundamentales para llamar y retener las inversiones internacionales”, sostuvo. El exdirector del Departamento Nacional de Planeación hoy consultor privado, Hernando José Gómez, agrega que la importancia de este instrumento en el nuevo modelo de industrialización, es que pueden desarrollar, como ya se empieza a ver, esquemas de parques industriales en la media que genera economías de escala.
“Incluso en Colombia ya se está aprovechando el tipo de encadenamiento y se suministran productos entre sí”, sostiene.
El director del Consultorio de Comercio Exterior de la Universidad Icesi, José Roberto Concha, plantea que en ese proceso de industrialización se deben establecer, desde el Gobierno, estrategias como líneas de financiación de Bancóldex para establecimiento de nuevas empresas en zonas francas.
“Debemos quitarnos los prejuicios y ver estos mecanismos como una posibilidad de crecimiento del sector industrial tanto en comercio exterior como en desarrollo nacional. La ZF es el modelo ideal para impulsar la industria y por ello hay que promoverlas en vez de desconfiar. De ahí la importancia que pasen a ser manejadas y aprobadas bajo la política del Ministerio de Comercio, porque la Dian es un ente que regula y controla y no promueve”, añadió.
El director ejecutivo de la Cámara de Zonas Francas de la Andi, Édgar Martínez, reitera que en la medida que este instrumento mantenga condiciones de estabilidad jurídica y en reglas de juego se pueden mejorar las exportaciones colombianas. Según Martínez, por mes las zonas francas califican unas 20 empresas como usuarios. “Se ha frenado el número de solicitudes y aprobaciones, la idea es que con los ajustes se aumente y se desarrollen más”, dijo. El directivo sostiene que no hay saturación de estos instrumentos en el mercado y por el contrario afirma que viene disminuyendo el área disponible. “A ese ritmo en cuatro años ya no habría área para que empresas lleguen a este régimen, si no se promueven”, indicó.
