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Entre 1.942 y 1.950 no hubo obras y entre 1.960 y 1.990 se construyeron en promedio 9 por año. El ascenso realmente comenzó hacia el año 2.000 con la construcción de más de 12 y en la actualidad se están planeando, diseñando y construyendo cerca de 230, con la expectativa de que para finales del 2.020 estén culminando las obras.
El país ha tomado la decisión de mejorar su infraestructura de carreteras rurales y para ello está desarrollando el más ambicioso programa de construcción y mejoramiento de vías con el famoso, comentado y criticado programa de concesiones de cuarta generación. Para atravesar la topografía agreste de nuestras cordilleras se hace necesario contar con elementos viales como: corte y terraplén cada vez de mayor altura, puentes, viaductos y por supuesto los túneles viales.
Es bueno tener presente que los túneles viales son obras de alta complejidad técnica donde confluyen varias disciplinas del conocimiento: la planeación, el diseño vial, la geología y la geotecnia, la hidrología, las ingenierías eléctrica, electrónica y mecánica, los ITSs (Sistemas inteligentes de transporte), las ingeniería económica y financiera, entre muchas otras. Así mismo, el país debe tener en cuenta que los túneles viales además de su complejidad técnica, son obras que tienen un alto costo (en promedio, $40 millones y $70 millones por cada metro), contanto el tiempo que implica la obra: entre cuatro y cinco años. Ante esta realidad debemos preguntarnos ¿Contamos con los suficientes profesionales con experiencia probada y bien formada en el ámbito académico para hacer la tarea de manera exitosa? La respuesta es, no.
Hay profesionales y empresas nacionales que cuentan con alguna y buena experiencia, pero debemos ser humildes, no es suficiente para el tamaño de este reto. Además después de construir, el esfuerzo debe continuar con la operación y el mantenimiento de esta infraestructura vial.
Si queremos que este panorama cambie, desde la academia se deben estructurar programas académicos como: cursos cortos, pasantías internacionales, diplomados, especializaciones, maestrías y por qué no doctorados, que le permitirán a Colombia formar una generación de profesionales que ayuden hacer esta tarea de manera excelente.
El pasado quedó atrás, debemos avanzar y preparar una nueva generación de profesionales que posibiliten a la nación la planeación, el diseño, la operación y el mantenimiento de los túneles viales. Son obras complejas, de alto costo, demoradas, que engloban un alto riesgo, pero el reto hay que asumirlo y la academia tiene una importante responsabilidad en formar personas y profesionales que se le midan a la construcción de un país en busca de un mejor desarrollo económico y social.
Túnel del Boquerón tendrá cierre programado
Esta semana la Agencia Nacional de Infraestructura (ANI) tuvo que cerrar los túneles de Boquerón, Bijagual y Buenavista por obras de mantenimiento. Estos cierres se llevarán acabo también los días 23 y 24 de este mes. No obstante, el cronograma de mantenimiento se extenderá durante este año ya que las reparaciones se harán el resto del año.
