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El Gobierno de Donald Trump impuso nuevas sanciones y otras medidas punitivas a los gobiernos de Cuba y Venezuela,
Reino Unido expresó su preocupación por los nuevos requerimientos de Estados Unidos para que empresas extranjeras se ciñan a sus sanciones contra Cuba, que fueron rechazadas por Gran Bretaña y otras naciones europeas.
"La aplicación extraterritorial (...) de sanciones, que consideramos ilegales bajo la ley internacional, amenaza con dañar a compañías europeas y británicas que hacen negocios legítimos en Cuba al exponerlas a responsabilidad ante las cortes estadounidenses", dijo el jueves en un comunicado la Oficina de Relaciones Exteriores del Reino Unido.
"Trabajaremos junto a la UE para proteger los intereses de nuestras compañías", añadió el comunicado.
El miércoles, el Gobierno de Donald Trump impuso nuevas sanciones y otras medidas punitivas a los gobiernos de Cuba y Venezuela, buscando incrementar la presión de Estados Unidos sobre La Habana para que deje de apoyar al presidente venezolano, Nicolás Maduro.
El plan es comprar tierras degradadas y restaurar los bosques plantando árboles nativos, como el ipé y el palo rosa, y maderas de alto precio, como la caoba africana
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