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El West Texas subió a US$81 por barril, poniendo al índice de referencia de EE.UU. en camino a una ganancia de 1% esta semana
El petróleo se dirigía a una segunda ganancia semanal ya que el optimismo sobre una demanda china más fuerte eclipsó una perspectiva más débil en otras economías importantes.
El West Texas Intermediate subió a US$81 por barril, poniendo al índice de referencia de EE.UU. en camino a una ganancia de poco más de 1% esta semana. El consumo chino ha estado repuntando después de que el principal importador de crudo abandonara las estrictas restricciones por el virus, con señales de un aumento de las compras por parte de las refinerías en el mercado físico.
Aún así, la debilidad en otros lugares ha limitado el repunte. La presidenta del Banco Central Europeo, Christine Lagarde, prometió que la política seguirá siendo estricta ya que la inflación sigue siendo demasiado alta. En EE.UU., la gobernadora de la Reserva Federal, Lael Brainard, considerada una paloma, dijo el jueves que las tasas deberán permanecer elevadas durante un período.
El crudo se vio sacudido en las primeras tres semanas del nuevo año cuando los inversores evaluaron las fuerzas opuestas del mercado, así como las perspectivas de los flujos rusos en 2023 a medida que se endurecen las sanciones en medio de la guerra en Ucrania. En ese contexto, hay perspectivas muy divergentes de los bancos sobre hacia dónde se dirige el crudo, con Goldman Sachs Group Inc. argumentando que el Brent podría superar los 100 dólares por barril, mientras que JPMorgan Chase & Co. es mucho más cauteloso.
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