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A fines de enero, el Banco Central permitió una depreciación de 18% en apenas dos ruedas cambiarias. Desde entonces, el valor de la moneda norteamericana en el mercado oficial siguió deslizándose aunque casi siempre con microdevaluaciones. Los precios minoristas, en tanto, aumentaron un 15% sólo hasta junio, y todavía hay que sumar entre 1 y 2 puntos porcentuales más por la inflación de julio.
En su cuenta de Twitter, la consultora que dirige Eduardo Levy Yeyati sostuvo que “el tipo de cambio real continúa perdiendo competitividad” y calculó que “ya cedió 78% de lo ganado con la devaluación”.
“Julio fue otro mes con bajo nivel de compra de divisas para el Bcra y el pago de vencimientos de deuda deja un balance negativo en reservas”, añadió.
El segundo trimestre había cerrado con un balance cambiario positivo en el que el Central pudo sumar US$2.271 millones a las reservas, después de ocho trimestres consecutivos de caída. Aún por encima del pago de servicios de deuda, el renglón que más complica las divisas es el del sector energético, según se desprende de un análisis del propio Banco Central.
Elypsis también sostuvo que el “aumento en los futuros” y la “baja en las tasas incentivan la dolarización con un Banco Central muy limitado para frenar el deterioro del mercado de cambios”.
Habrá una contribución de hasta US$900 millones, repartidos en US$350 millones al cierre de la transacción y US$500 cuando se toma la decisión
La rebaja podría reforzar la creciente preocupación de Wall Street sobre el mercado de bonos soberanos de EE. UU
La medida, establecida en la Proclamación 10908, representa un descuento de alrededor del 40% sobre la tarifa general
