Nuevos obstáculos en las negociaciones del cierre de gobierno de Estados Unidos

Las perspectivas de un acuerdo esta semana en el Capitolio para poner fin al cierre de gobierno más largo de la historia de Estados Unidos se desvanecen rápidamente, a pesar de las advertencias sobre el empeoramiento de las interrupciones de vuelos y la creciente preocupación por la ayuda alimentaria para los estadounidenses de bajos ingresos.

El presidente de la Cámara de Representantes, Mike Johnson, dijo el jueves que es menos optimista sobre las negociaciones bipartidistas en el Senado, donde los demócratas han exigido que los republicanos aborden el tema de los subsidios de atención médica que están por vencer a cambio de sus votos para reabrir el gobierno.

Varios senadores demócratas, incluidos moderados que estaban en conversaciones con los republicanos para poner fin al cierre del gobierno y colegas más progresistas que exigieron que el partido mantuviera su postura, se reunieron el jueves por la mañana en la oficina del líder de la minoría, Chuck Schumer.

Posteriormente, el senador Chris Coons, demócrata de Delaware, declaró a los periodistas que el estancamiento no terminaría hasta que el presidente Donald Trump estuviera dispuesto a negociar la renovación de los subsidios del seguro médico en virtud de la Ley de Cuidado de Salud Asequible, u Obamacare.

“Mientras su postura sea que no estamos dispuestos a hablar con ustedes, vamos a seguir luchando”, dijo Coons. Los efectos del cierre del gobierno, que ya cumple 37 días, se agravan. El Departamento de Transporte y la Administración Federal de Aviación de EE. UU. anunciaron el miércoles que ordenarán a las aerolíneas reducir 10 % su capacidad de vuelo en 40 aeropuertos principales para aliviar la presión sobre el personal. Los controladores aéreos trabajan sin cobrar desde que comenzó el cierre el 1 de octubre.

Los demócratas centristas han explorado la posibilidad de acordar una medida provisional a cambio de la promesa de una votación en el Senado sobre los subsidios de Obamacare. El acuerdo también incluiría en la medida provisional los proyectos de ley de gastos anuales para Agricultura, Asuntos de Veteranos y el poder legislativo, lo que pondría fin a la incertidumbre sobre los cupones de alimentos y los beneficios de nutrición infantil.

El jueves, los republicanos presentaron una oferta formal a los demócratas sobre los tres proyectos de ley de asignaciones presupuestarias para todo el año. También están considerando una posible cláusula para revertir los despidos de aproximadamente 6.000 empleados federales que la administración intentó llevar a cabo durante el cierre del gobierno, según un asesor republicano.

Sin embargo, el jueves Johnson se negó a prometer una votación en la Cámara de Representantes sobre la extensión de los subsidios, creando así un obstáculo para un acuerdo en el Senado.

El senador Gary Peters, demócrata de Michigan que ha estado negociando con los republicanos, calificó la negativa de Johnson como “un problema significativo” y dijo que no ve que el cierre termine pronto, y agregó: “Tenemos que asegurarnos de tener un acuerdo que pueda obtener un amplio apoyo”.

El representante Hakeem Jeffries de Nueva York, el principal demócrata de la Cámara, señaló que su partido se había envalentonado por su victoria en contiendas clave en las elecciones del martes, incluidas las gobernaciones de Virginia y Nueva Jersey y la contienda por la alcaldía de Nueva York. “Esta es parte de la razón por la que los republicanos fueron rechazados en todo el país”, dijo Jeffries.

El líder de la mayoría del Senado, John Thune, planea una decimoquinta votación el viernes para iniciar el debate sobre la medida cautelar aprobada por la Cámara de Representantes. Los republicanos afirman que este es solo un primer paso para enmendar el proyecto de ley con una nueva versión que incluya los tres presupuestos anuales completos y una medida cautelar para las agencias gubernamentales restantes.

“Veremos qué tan en serio se lo toman los demócratas”, dijo el senador republicano John Kennedy de Luisiana sobre la votación del viernes. “Nadie sabe realmente en qué situación estamos hasta que se celebre esa votación”. Los senadores dijeron que planean permanecer en Washington durante el fin de semana para intentar llegar a un acuerdo.