Desde Jeff Bezos a David Vélez, titanes de la tecnología que se reúnen en Sun Valley

La política global y el futuro del presidente estadounidense Joe Biden son los temas prioritarios de los líderes empresariales que se reúnen en la Conferencia de Sun Valley.

El evento anual, organizado por el banco de inversión boutique Allen & Co. en el resort Sun Valley en Idaho, ha sido un caldo de cultivo histórico para acuerdos con los medios y suele ser un foro para que las élites de la tecnología y los medios discutan el futuro de su industria.

Sin embargo, el llamado campamento de verano para multimillonarios de este año se celebra tras las elecciones transformadoras en el Reino Unido y Francia . También se produce poco después del desastroso debate del 27 de junio entre Biden y Donald Trump, que ha provocado pedidos de algunos legisladores y donantes demócratas para que se haga a un lado.

Eso ha puesto las elecciones estadounidenses y sus ramificaciones para las empresas en el tope de la agenda en Sun Valley. Además de esa conversación, tres gobernadores que se barajan como posibles reemplazos de Biden (Gretchen Whitmer de Michigan, Josh Shapiro de Pensilvania y Wes Moore de Maryland) están programados para asistir al evento.

La intriga política se suma a la continua agitación en la industria de los medios. Las compañías tradicionales, que en su día dominaban el universo del entretenimiento, están viendo cómo sus modelos de negocio se desmoronan debido al colapso de la televisión por cable, la caída de los ingresos por publicidad y el auge del streaming. Los gigantes tecnológicos están ganando cada vez más cuota de mercado, ayudados por sus presupuestos aparentemente ilimitados.

Ejecutivos de ambos bandos asisten a Sun Valley y probablemente también intercambiarán opiniones sobre esas tendencias. El director ejecutivo de Meta Platforms, Mark Zuckerberg, el fundador de Amazon.com, Jeff Bezos, y el director ejecutivo de OpenAI, Sam Altman, planean asistir, según una la lista de asistentes revisada por Bloomberg News, al igual que personalidades de los medios y el entretenimiento como Bob Iger de Walt Disney, Brian Roberts de Comcast, David Zaslav de Warner Bros. Discovery y Kenichiro Yoshida de Sony Group, o David Vélez, de Nubank.

“Los medios de comunicación tradicionales ya no están en la posición de poder que tenían antes, como lo demuestran las turbulencias, las fricciones y los cambios que se ven por todas partes”, afirmó Mark Boidman, director de medios globales del banco de inversiones Solomon Partners. “Ya no tienen necesariamente los bolsillos más profundos, las mejores relaciones o las mejores audiencias. Necesitan asociarse para ganar escala y reducir los costos desde una perspectiva de contenido”.

El impacto de las elecciones estadounidenses en las fusiones y adquisiciones también será probablemente el centro de atención, independientemente de si Biden u otra persona están en la lista demócrata. Si bien se sabe que la cumbre de medios, muy vigilada, generó discusiones sobre fusiones y adquisiciones entre sus invitados (se dice que el acuerdo de Comcast por NBCUniversal y la compra del Washington Post por parte de Bezos se originaron allí), un clima antimonopolio más duro bajo Biden ha enfriado la actividad en todos los sectores. Hay mucho optimismo de que la realización de acuerdos será más fácil si Trump regresa a la Casa Blanca.

A continuación se presentan algunos otros temas de interés que debe tener en cuenta:

La fusión de Paramount Global con Skydance Media, anunciada el domingo por la noche, elimina a uno de los potenciales compañeros de baile para las compañías tradicionales que buscan resolver sus problemas mediante fusiones y adquisiciones. W y Comcast seguramente atraerán la atención, ya que persisten las preguntas sobre cuál será su papel en la consolidación de la industria.

Disney y Comcast aún están negociando qué valor asignar a Hulu, del que son copropietarios. Disney planea comprar la participación de un tercio de Comcast en el servicio de streaming.

Las empresas de medios están asociando sus operaciones de streaming con las de sus competidores para reducir los costos y mejorar la rentabilidad, en un intento de recrear el paquete de cable. Disney y Warner Bros., por ejemplo, están combinando Disney+, Hulu y Max. Comcast tiene un paquete con Netflix, Apple TV+ y su propio servicio Peacock.

Los derechos de transmisión son competitivos y costosos. La Asociación Nacional de Baloncesto está a punto de anunciar un acuerdo de 11 años por US$76.000 millones con Disney, Comcast y Amazon.