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Las bolsas más destacadas en Asia también cerraron con pérdidas.
A pesar de que moderaron las caídas, las principales bolsas europeas no lograron revertir la tendencia en rojo que se presenta desde ayer, contrario a lo que sucede en Wall Street que al filo del cierre del mercado, los principales índices comenzaron a rebotar tras bajas entre 0,75% y 0,86% hacia la mitad de la sesión.
A minutos de que cierre, el Dow Jones ganaba 2,32%, sobre los 24.910 puntos, mientras que el S&P 500 rondaba un incremento de 1,30% superando 2.683 unidades. El Nasdaq, por otro lado, subía 2,13% hasta 7.116 puntos.
Cabe recordar que la volatilidad se tomó la bolsa de Nueva York en las primeras horas de la jornada, luego del lunes negro que vivieron las plazas bursátiles del mundo, repitiendo con el comportamiento que hoy se presentó en Europa y Asia.
La volatilidad se había apoderado de Wall Street pues sobre el medio día, el Dow Jones y el Nasdaq se recuperaron levemente con alzas de 0,17% 0,02%, respectivamente, mientras que el S&P 500 continuaba cayendo 0,19%.
El comportamiento se dio luego de la jornada del 5 de febrero, en la que en los últimos 15 minutos de la plaza bursátil en Nueva York, el Dow Jones llegó a perder 1.500 puntos.
En Europa el Ibex 35, el principal indicador del parqué español, volvió a caer por cuarto día consecutivo y cerró con una contracción de 2,5%. El índice no pudo recuperar los 10.000 puntos y terminó la jornada del martes con 9.810 unidades, lo que le significó su peor caída en cuatro meses y tocar mínimos de 11 meses.
El CAC 40 de Francia tuvo una baja de 2,35% y se ubicó en los 124,0 puntos. El DAX alemán terminó en 294,83 con una caída de 2,32%, mientras que el inglés Ftse 100 también bajó 2,64% hasta los 193,58 puntos.
Durante la jornada, según Reuters, el índice de volatilidad Stoxx 50, el principal indicador del nerviosismo de los mercados en Europa, "subió 8,1 puntos hasta un máximo de 27,5, lo que lo llevó a su nivel más alto en 18 meses".
En Asia, el Nikkei anotó su mayor pérdida desde junio de 2016, con un retroceso de 4,73% llegando a 21.610,24 puntos, con lo que anotó su punto más bajo desde el 20 de octubre del año pasado.
El Banco Central de Japón hizo un llamado a la calma y, según reportó la agencia de noticias Reuters, aseguró que mantendrá un "enorme respaldo monetario" para mantener el crecimiento económico, disipando las dudas de un posible desplome de las acciones.
"La inflación japonesa ni siquiera ha alcanzado 1%. Como tal, es inapropiado cambiar la política monetaria en forma prematura sólo para crear un espacio para políticas futuras", dijo el gobernador del Banco de Japón, Haruhiko Kuroda.
El mercado está esperando si el comportamiento que se está dando corresponde a una corrección esperada luego de que las plazas bursátiles, especialmente la de Nueva York, completarán varios meses en récord.
El dato de empleo y el incremento salarial de la semana pasada en Estados Unidos, junto con mayores perspectivas de crecimiento en ese país, hacen pensar que la inflación crecerá más rápido de lo esperado e incremente la presión sobre la Reserva Federal para que suba las tasas de interés de una manera más agresiva.
El buen crecimiento económico que se viene presentando a nivel mundial también introduce presiones inflacionarias que hacen pensar que la Fed no será la única que suba sus tipos.
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