La Casa Blanca presenta amplio abanico de medidas para mitigar los riesgos de la IA

El presidente de Estados Unidos, Joe Biden, tomará el lunes medidas de amplio alcance en materia de inteligencia artificial (IA), tratando de aumentar la seguridad, al tiempo que se protege a los consumidores, los trabajadores y los grupos minoritarios de los riesgos relacionados con esta tecnología.

El decreto que dará a conocer es el más reciente paso del Gobierno para establecer parámetros en torno a la IA a medida que aumenta rápidamente en capacidad y popularidad en un entorno de, hasta ahora, regulación limitada.

Empresas de IA como OpenAI, Alphabet y Meta Platforms acordaron previamente de forma voluntaria comprometerse a poner marcas de agua a los contenidos generados por IA para hacer más segura la tecnología.

El nuevo decreto, que Biden destacará en un acto el lunes, va más allá de esos compromisos.

Exige que los desarrolladores de sistemas de IA que planteen riesgos para la seguridad nacional, la economía o la salud pública de Estados Unidos compartan los resultados de las pruebas de seguridad con el Gobierno, de acuerdo con la Ley de Producción de Defensa, antes de que se hagan públicos.

También ordena a las agencias que establezcan normas para esas pruebas y aborden los riesgos químicos, biológicos, radiológicos, nucleares y de ciberseguridad relacionados, según la Casa Blanca.

Para garantizar la claridad de las comunicaciones gubernamentales, el Departamento de Comercio "desarrollará directrices para la autenticación de contenidos y marcas de agua" para los elementos de etiquetado generados por IA, informó la Casa Blanca en un comunicado sobre el decreto.

El Jefe Adjunto de Gabinete de la Casa Blanca, Bruce Reed, calificó el decreto, que también ahonda en la privacidad, la discriminación en la vivienda y el desplazamiento de puestos de trabajo, como el "conjunto de medidas más enérgicas" que ningún gobierno haya tomado para garantizar la seguridad de la IA.

"Es el siguiente paso en una estrategia agresiva para hacer todo lo posible en todos los frentes para aprovechar los beneficios de la IA y mitigar los riesgos", dijo en un comunicado.

El Grupo de los Siete países industrializados acordará el lunes un código de conducta para las empresas que desarrollen sistemas avanzados de inteligencia artificial, según un documento del G7.

Un funcionario de alto rango del Gobierno, que informó a los periodistas antes de la presentación oficial del decreto, rebatió las críticas de que Europa había sido más agresiva en la regulación de la IA que Estados Unidos.

El funcionario dijo que el decreto tenía fuerza de ley y que la Casa Blanca creía que la acción legislativa del Congreso también era necesaria para la gobernanza de la IA.

Biden ha pedido al Congreso, en particular, que apruebe legislación sobre la privacidad de los datos, dijo la Casa Blanca.

Las autoridades estadounidenses han advertido que la IA puede aumentar el riesgo de sesgos y violaciones de los derechos civiles, y el decreto de Biden trata de abordar esta cuestión pidiendo orientaciones a los propietarios, los programas federales de prestaciones y los contratistas federales "para evitar que los algoritmos de IA se utilicen para exacerbar la discriminación", según el comunicado.

La orden también pide el desarrollo de "mejores prácticas" para hacer frente a los daños que la IA puede causar a los trabajadores, incluyendo el desplazamiento de empleo, y requiere un informe sobre los impactos en el mercado laboral.

La vicepresidenta Kamala Harris asistirá esta semana a una cumbre mundial sobre IA en Reino Unido; también se espera que China esté representada en la reunión, organizada por el primer ministro británico, Rishi Sunak.

Sunak ha afirmado que sólo los gobiernos pueden hacer frente a los riesgos que plantea la IA, una tecnología que, en su opinión, podría facilitar la fabricación de armas químicas o biológicas, extender el miedo y, en el peor de los casos, escapar al control humano.