JPMorgan prevé que los inversores opten por el oro y la tecnología en medio del riesgo de recesión

Es probable que los inversores prefieran las acciones de oro y tecnología, ya que se espera que esas apuestas sirvan de protección contra la posibilidad de una recesión en Estados Unidos este año, según estrategas de JPMorgan Chase & Co.

El comercio definido como "larga duración" se expresa por tener sobrepeso en oro, acciones de crecimiento como empresas de tecnología y divisas (USD corto), escribieron en una nota estrategas como Nikolaos Panigirtzoglou y Mika Inkinen, y agregaron que la apuesta está lejos de estar llena de tasas. debido a la curva de rendimiento altamente invertida.

“La crisis bancaria de EE. UU. ha aumentado la demanda de oro como un indicador de tasas reales más bajas, así como una cobertura contra un 'escenario catastrófico'”, escribieron.

JPMorgan señala que el tema de la larga duración parece haberse convertido en un consenso en los últimos meses. Tal operación parece "relativamente atractiva", ya que tendría una desventaja limitada en un escenario de recesión leve en EE. UU., pero una gran ventaja en una recesión más profunda.

Otros puntos clave del informe:

De hecho, la participación de la tecnología en la renta variable global ha aumentado considerablemente este año, acercándose a los máximos de 2021, lo que implica que el mundo en su conjunto se ha vuelto más sobreponderado en tecnología. Además, al observar el interés corto en los sectores de renta variable de EE. interés corto que apunta a un aumento en la exposición neta de los inversores de renta variable largos/cortos.

Los inversores institucionales acudieron en masa al oro, pero parece que los inversores minoristas aumentaron la exposición a Bitcoin.En crédito, los inversores apuestan en largo por bonos corporativos con grado de inversión"Esto se debe a que los bonos corporativos de alto grado suelen tener una duración más alta de alrededor de 7-8 años, aproximadamente el doble que los bonos corporativos de alto rendimiento".

En divisas, los inversores expresan el comercio de duración con una posición corta en dólares estadounidenses, "dada la fuerte correlación negativa entre los bonos estadounidenses y el rendimiento del DXY".