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La inflación subyacente, considerada un mejor parámetro para medir la trayectoria de los precios porque elimina productos de alta volatilidad, se ubicó en 3,58%
La inflación interanual de México desaceleró más de lo previsto en la primera mitad de noviembre, fortaleciendo los argumentos para que el banco central continúe reduciendo la tasa clave de interés.
El índice general de precios al consumidor se moderó a 4,56%, después de haber repuntado en las dos quincenas anteriores, retomando su camino rumbo al objetivo oficial de un 3% +/- un punto porcentual, de acuerdo con cifras divulgadas el viernes por el instituto de estadística, Inegi.
Analistas anticipaban una tasa de 4,69%, según un sondeo de Reuters.
A su vez, la inflación subyacente, considerada un mejor parámetro para medir la trayectoria de los precios porque elimina productos de alta volatilidad, se ubicó en 3,58%, su nivel más bajo desde mayo de 2020.
La semana pasada, Banco de México disminuyó su tasa de referencia en 25 puntos base por tercera reunión consecutiva, destacando el progreso en reducir la inflación subyacente con lo que afirmó que es posible que haya futuros ajustes adicionales al costo de los créditos.
La gobernadora del banco central mexicano, Victoria Rodríguez, reiteró en una entrevista con Reuters esta semana que la autoridad monetaria podría seguir rebajando los tipos de interés, desde su actual 10,25%, ante el avance de la desinflación.
La próxima decisión de Banco de México está programada para el 19 de diciembre y será la última del año.
Sólo en los primeros 15 días de noviembre, los precios aumentaron un 0,37%, mientras que el índice subyacente arrojó una tasa de 0,04%, dijo el Inegi.
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