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Netanyahu dijo más temprano el jueves que la “misión” de Israel en Gaza no había terminado y que la guerra no había concluido
La vicepresidenta Kamala Harris dijo que la muerte del líder de Hamas, Yahya Sinwar, ofrecía “una oportunidad para poner fin finalmente a la guerra en Gaza” y dijo que el asesinato haría que Israel fuera más seguro. “Es hora de que el día después comience sin Hamás en el poder”, dijo Harris el jueves después de un evento de campaña con estudiantes universitarios en Milwaukee.
La declaración fue una clara señal del deseo del candidato presidencial demócrata de aprovechar la muerte de Sinwar para ayudar a impulsar un proceso de alto el fuego que se ha estancado repetidamente en los últimos meses.
La guerra que Israel lleva un año librando en respuesta al ataque de Hamas en octubre pasado, dirigido por Sinwar, se ha convertido en un punto de conflicto en las elecciones presidenciales de Estados Unidos.
Si bien tanto Harris como el candidato presidencial republicano Donald Trump han expresado su apoyo a Israel, la actual campaña en Gaza –y el aumento de las muertes de civiles– ha dividido a los demócratas, y algunos piden al gobierno que restrinja o ponga fin a las ventas de armas debido a la crisis humanitaria. “Siempre trabajaré para crear un futuro de paz, dignidad y seguridad para todos”, dijo Harris.
Sus comentarios se hicieron eco de una declaración emitida minutos antes por el presidente Joe Biden, quien dijo que planeaba hablar pronto con el primer ministro israelí, Benjamin Netanyahu, “para felicitarlos, para discutir el camino para llevar a los rehenes a casa con sus familias y para poner fin a esta guerra de una vez por todas, que ha causado tanta devastación a personas inocentes”.
“Ahora existe la oportunidad de un ‘día después’ en Gaza sin Hamás en el poder, y de un acuerdo político que ofrezca un futuro mejor tanto para israelíes como para palestinos”, dijo Biden. “Yahya Sinwar era un obstáculo insuperable para lograr todos esos objetivos. Ese obstáculo ya no existe”.
Pero Netanyahu dijo más temprano el jueves que la “misión” de Israel en Gaza no había terminado y que la guerra no había concluido, sugiriendo que las hostilidades podrían continuar.
Los republicanos han aprovechado el derramamiento de sangre para argumentar que Trump estaría en mejores condiciones de calmar los conflictos en todo el mundo y de fastidiar a los demócratas por las divisiones en su coalición electoral.
Harris fue recibida el jueves en el campus de la Universidad de Wisconsin-Milwaukee por manifestantes pro palestinos, y a la prensa no se le permitió observar sus interacciones con los estudiantes.
Los demócratas están particularmente preocupados por el impacto que este asunto pueda tener en la contienda en estados como Michigan y Minnesota, con grandes poblaciones árabe-estadounidenses.
Más de 100.000 votantes en las primarias presidenciales demócratas de Michigan (y varios cientos de miles más en otros estados) votaron a favor de enviar delegados “no comprometidos” a la convención de nominación del partido para protestar por la gestión del conflicto por parte de la administración.
El movimiento presionó sin éxito para que se añadiera un orador pro-palestino a la agenda televisada en horario de máxima audiencia de la reunión.
A principios de este mes, Harris se reunió con líderes musulmanes y árabes estadounidenses en Michigan en otra reunión a puertas cerradas mientras buscaba abordar las preocupaciones sobre el apoyo de Estados Unidos a Israel en el conflicto en curso.
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