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En medio de su intervención en la Asamblea General de las Naciones Unidas, Trump habló sobre la guerra comercial con China, las sanciones contra Irán y el socialismo.
Uno de los protagonistas del primer día de intervenciones en la Asamblea General de la Organización de las Naciones Unidas (ONU), en su edición número 74, fue el presidente de Estados Unidos, Donald Trump, quien aprovechó sus casi 40 minutos ante la plenaria para hablar de una amplia variedad de temas: crecimiento económico de EE.UU., defensa del nacionalismo, relaciones comerciales con China, la participación de Irán en el terrorismo y hasta de Venezuela.
Precisamente fue en este último tema donde manifestó los comentarios más fuertes de su discurso al decir que lamentablemente “Venezuela era una víctima del socialismo”, una corriente de la cual aseguró “ha matado a 100 millones de personas”. Esa es la razón por la que aseguró ante los representantes de 193 países que integran la ONU, que uno de los retos más importantes que afrontan los países hoy en día es el espectro del socialismo.
“Los acontecimientos en Venezuela nos recuerdan a todos que el socialismo y el comunismo no se basan en justicia ni equidad, no tratan de ayudar a los pobres ni buscan el bienestar de las naciones. Solo se basan en una cosa: el poder para la clase dirigente”, dijo Trump.
“La situación que vive Venezuela se ha venido discutiendo desde hace mucho tiempo. Alcanzaron a decir que las horas estaban contadas, pero a nadie le interesa participar en esa guerra de frente”.
“A Donald Trump le caería bien que la guerra comercial con China se resolviera este año porque eso le cedería la razón, sin embargo, es una situación que no es tan fácil para llegar a un acuerdo”.
El Mandatario agregó que detrás del régimen de Nicolás Maduro está otro régimen peos y es el de Cuba. “El dictador Maduro es un muñeco, una marioneta, un títere de Cuba que se esconde en su propio pueblo, protegido por agentes cubanos (…) Cuba le arrebata la riqueza petrolera a Venezuela para financiar su gobierno comunista”, agregó Trump, quien destacó además que él nunca permitirá que EE.UU. sea un país comunista.
Trump también envió un mensaje a los venezolanos que deben padecer el régimen y según él están atrapados en una pesadilla: “Sepan que América está unida detrás de todos ustedes, tenemos ayuda humanitaria lista para entregarla y seguimos muy de cerca la situación de Venezuela”.
Ante la plenaria de la ONU, el Presidente de EE.UU. también destacó al grupo de 55 países que a inicios de este año declararon legítimo el mandato de Juan Guaidó como presidente de Venezuela para apoyar el regreso de la democracia al país vecino.
Las críticas a China
Desde enero de 2018 empezó la guerra comercial entre Estados Unidos y China, una historia que parece no acabar. Ayer Trump le dedicó la primera parte de su discurso a esta coyuntura, señalando que no permitirá un mal acuerdo con los asiáticos. Criticó las malas prácticas comerciales chinas y cuestionó la entrada del país asiático a la Organización Mundial del Comercio (OMC) en 2001.
La entrada a la OMC habría favorecido a China en materia de comercio y su vez, según Trump, “se hicieron cosas que eran inaceptables para nosotros con respecto al estado de derecho y a la propiedad privada”. El Mandatario señaló que los chinos han vulnerado estos estatutos, entre otras cosas, porque la economía china tiene “barreras de mercado, grandes subsidios estatales, la manipulación de la moneda, tecnología forzada y la propiedad intelectual vulnerada”.
El gobierno chino ha venido levantando los aranceles de unos cuantos productos americanos y en octubre los representantes de los dos gobiernos se reunirán en Washington para hablar sobre la guerra comercial. “El pueblo estadounidense está absolutamente comprometido a restablecer el equilibrio en nuestra relación con China. Esperemos que podamos alcanzar un acuerdo que sea beneficioso para ambos países”, dijo Trump.
Los ataques del pasado 14 de septiembre a la mayor petrolera del mundo, Saudi Aramco, ubicada en Arabia Saudita, también hicieron parte del discurso de Trump, pues el ataque revivió las tensiones bélicas entre EE.UU. e Irán. La semana pasada, el presidente Trump decidió imponerle sanciones económicas al Banco Central Iraní y días más tarde, Mark Esper, jefe del Pentágono, anunció el envío de militares para proteger a Arabia Saudita y a los Emiratos Árabes Unidos, asegurando que solo fungirían como protectores de los estados, sin atacar a Irán.
En medio de la intervención, Trump dejó claro que las sanciones impuestas a Irán “no serán levantadas mientras Irán mantenga un comportamiento amenazante, serán endurecidas”. También aseguró que su gobierno no tiene intenciones de despertar una guerra con el país de Rouhani, “queremos socios, no adversarios”, dijo.
Trump finalizó exaltando el nacionalismo como la forma para ser un país exitoso.
La Cámara anunció que el presidente de EE.UU. será investigado
Una llamada entre Trump y su homólogo de Ucrania para desprestigiar a Joe Biden sería la razón por la que la presidenta de la Cámara de Representantes de Estados Unidos, Nancy Pelosi, anunció la apertura de una investigación en contra de Trump. El mandatario confirmó que había retenido cerca de US$400 millones en ayuda para Ucrania, pero negó que fuera para perjudicar a Biden. Trump publicará la transcripción de la llamada hoy.
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