Economías endeudadas de UE en encrucijada a 2014

Enfrentándose a lo que algunos economistas dicen que podría ser la "década perdida", el destino de los países más endeudados de la Unión Europea (UE) podría depender de los pasos que los gobiernos den durante el próximo año. 

Las recientes señales económicas que salen de Grecia, Irlanda, Italia, Portugal y España han sido mixtas.

Todos los países referidos excepto España tienen una proporción de Deuda-PIB de al menos 100%, según las estadísticas del Banco Mundial, lo que les obliga a refinanciar la deuda en mercados muy volubles. Todos sufren de un crecimiento lento, altas tasas de desempleo, y sectores bancarios demasiado cautos.

Irlanda parece la más sana del grupo. El país ha salido del programa de rescate de la UE este mismo mes, y su economía está creciendo. Pero los valores de propiedad permanecen deflactados, y los niveles de deuda se están acercando a 125% del PIB del país, un nivel que los economistas afirman que es insostenible.

Italia y España también están camino a enmendarse, con algunas mejoras por parte de agencias de calificación aumentando la confianza del inversor. Pero las estadísticas muestran que la fuerza de la recuperación en estos países varía mucho de un sector económico a otro, y las tasas de crecimiento previstas para 2014 podrían incluso no mantener el ritmo del crecimiento de la población. Portugal va a la zaga pero por un camino similar.

El gobierno griego, mientras tanto, permanece solvente gracias principalmente a los fondos del Banco Central Europeo.

Sin embargo, el Banco Central Griego ha previsto un crecimiento económico positivo para el país en 2014. Por lo menos, la economía griega se ha estado contrayendo a un ritmo más lento.

El vuelco económico gradual en América del Norte debería ayudar al sector de las exportaciones de Europa, según explican economistas.

Pero según Luigi Pugliese, director gerente de las oficinas italianas de la consultoría Booz and Co., la mayoría de las señales positivas llegan del pensamiento a corto plazo de los planificadores económicos.

"Se está pensando demasiado sobre cuál es el mejor próximo paso y no suficiente sobre la planificación a largo plazo (...) Mi sensación es que no existe un buen plan o diseño a largo plazo, dijo.

Puglies apuntó la necesidad de que se lleven a cabo reformas estructurales dramáticas para fomentar tasas de crecimiento a largo plazo.

"Si pudiéramos empezar de cero y diseñar una economía, de ninguna manera tendríamos algo que se pareciera a estas economías europeas periféricas", afirmó Pugliese.

Giuseppe de Arcangelis, un experto económico internacional de la Universidad Sapienza de Roma, se mostró de acuerdo.

"El Banco Central Europeo no puede hacer más de lo que ya ha hecho, a menos que haga algo extremo como (aplicar) tasas de interés negativas, que podría añadir liquidez a la oferta de dinero", dijo De Arcangelis. "El crecimiento necesita venir desde dentro de estas economías".

Si esto no ocurre, y Pugliese advirtió de que esto debería ocurrir antes de 2015, cuando comiencen a expirar los préstamos de rescate, podría establecerse un período largo y desastroso de estancamiento económico que podría tener un impacto en estos países durante años.

Un primer buen paso, según los economistas, sería reformar el sector bancario de cada país para aumentar y facilitar el acceso al crédito.

Otros han mencionado mayores incentivos para la innovación o para las empresas que emplean a nuevos trabajadores, especialmente trabajadores de menos de 35 años, o que invierten en expandir sus operaciones en su territorio nacional.

Los economistas afirman que la presión fiscal general debería rebajarse cuando sea posible, con el objetivo de reducir su impacto en la economía.

"Algunos países han empapelado un montón de problemas con el dinero de rescate de la UE (...) Pero claramente esto no es una solución a largo plazo. Debe volverse a la competitividad estructural", dijo Pugliese.